"Nos ven solo como sacadores de la chamba"
Un trato más humano, reducir jornada laboral y mejoras salariales fueron las principales necesidades expuestas
En el 138 desfile del Día del Trabajo efectuado en Xalapa, afiliados a distintos sindicatos y confederaciones dicen afirmar que en lugar de avances, perciben retrocesos en los derechos laborales. En el caso de quienes forman parte de Servicios de Salud de Veracruz (Sesver) exponen la necesidad de un trato más humano y digno, así como una mejor distribución del personal calificado. Señalan además la necesidad de la entrega de insumos para poder desarrollar su labor de manera profesional y ética, pues tanto enfermeras como médicos, en muchos de los casos tienen que improvisar para poder dar atención a los pacientes.
“Tenemos horario de entrada pero no de salida. Aunque depende de la zona que atendamos, hay comisionistas que llegamos a trabajar más de 12 horas. Es ridículo que hace más de cien años se peleara por jornadas de ocho horas y ahora, muchos sigamos en las mismas”, expresan.
Trabajadores de hoteles, cafeterías y otros centros de servicio dicen percibir que en la actualidad hay más violaciones a los derechos laborales porque la gente se aguanta, “por necesidad”. “Se aprovechan de nuestra necesidad. No nos ven como humanos, somos simplemente sacadores de chamba, no importa el cansancio, no importa nada, los patrones solo quieren resultados”.
Afiliados al Sindicato de Trabajadores al Servicio del Poder Ejecutivo no solo exponen sino que también exigen recategorizaciones a la fiscal Verónica Hernández Giadáns. Aseguran que en la transición de la Procuraduría General de Justicia a la Fiscalía General, la recategorización no se ha cumplido, lo cual significa una vulneración y violación a sus derechos laborales. Afiliados al SUTSIEEEV exponen no una sino una serie de irregularidades. Enumeran que los directivos no respetan su contrato colectivo, que desde el Estado no hay apoyo al Instituto de Espacios Educativos y están en el olvido, incluidas las personas que ya están en proceso de jubilación.
El Sindicato Unificador del Movimiento Amplio de Trabajadores del Cobaev (Sumat-Cobaev) también exige el pago de prestaciones económicas en la entidad para más de 500 trabajadores, a quienes no les llegan desde hace siete años.
De igual manera, la Central Internacional de Sindicatos, Empresas y Organizaciones se pronuncia por respeto irrestricto al contrato colectivo del trabajo, fuentes de empleo con seguridad, salarios dignos y respeto a los derechos humanos.
El Sindicato de Profesionistas Administrativos de la Universidad Veracruzana (Afecuv) también enfatizó en la justicia laboral, la jubilación digna y que se haga extensivo el derecho de integrar el reconocimiento de antigüedad ante el Instituto de Pensiones del Estado.
DESFILE, DE MÁS DE SEIS HORAS
Ayer, trabajadores de distintas instituciones y empresas participaron en el desfile por el 138 aniversario conmemorativo del Día del Trabajo, cuya historia se remonta a 1886 en Chicago y a 1913 en México, cuando 25 mil obreros salieron a las calles por primera vez a exigir jornadas laborales de ocho horas.
Como es habitual, al frente estuvieron el gobernador del estado de Veracruz, Cuitláhuac García Jiménez, e integrantes de su gabinete, quienes posteriormente tomaron su lugar en el palco instalado.
Un trato más humano, respeto a jornadas laborales de ocho horas y mejoras salariales fueron las principales necesidades expuestas, previo a la marcha en la capital del estado, en la que participan aproximadamente 70 mil trabajadores afiliados a sindicatos y confederaciones. En el desfile no faltaron quienes se detuvieron frente al gobernador Cuitláhuac García Jiménez para dar a conocer sus principales necesidades y pedirle que los escuche y atienda.
En el que es considerado el desfile más largo de los que se efectúan en las distintas entidades del país, recorrieron la calle de Enríquez trabajadores de Xalapa y de diferentes partes de la entidad.
"Es ridículo que hace más de cien años se peleara por jornadas de ocho horas y sigamos en las mismas”
"No importa el cansancio, no importa nada, los patrones solo quieren resultados”.
La historia
se remonta a 1886, en Chicago, y a 1913, en México, cuando 25 mil obreros salieron a las calles por primera vez.