Una nueva visión a cualquier problema
La vida es así, llena de incertidumbres, desasosiegos, dudas, temores y miedos; sin embargo, esas hendiduras son lo que le dan sentido a nuestra existencia porque cada quebranto, pérdida o perjuicio te lleva a desear algo diferente.
La opinión común te dirá que tienes mala suerte y, en el mejor de los casos, que se debe a tus errores; no obstante, si puedes ser visionaria te darás cuenta que sólo son desafíos que puedes superar si lo deseas.
Más no basta con que te vendas la idea de ser positiva y trates de hacer una tabla de lo que deseas para que superes los retos que se presentan día a día. Antes podrías aprender a manejar tus emociones y ser visionaria, pues cuando te encuentras en el problema, no crees que existe algo mejor.
Generalmente te interrogas todo lo malo que te sucede, las malas amistades o relaciones y cómo poder sanar para no crear las mismas, pero ¿te has puesto a pensar cuánto tiempo inviertes en dicho cometido?
¿No será que lo único que falta es comprender que esas malas experiencias, sean las que sean, se presentaron para que trasciendas? ¿No será que lo que necesitas es una perspectiva diferente respecto a cómo ves las circunstancias de la vida? ¿No será que lo único que requieres es aprender a verte de una forma diferente?
A veces no basta con llevar o invertir horas y horas para aprender a perdonar y poder sanar; a veces sólo necesitas darle la vuelta a tu forma de ver y resolver las experiencias que se te presentan, pero, sobre todo, asimilar que eres lo que has aprendido y que puedes ser la mejor versión de ti misma.