Un compromiso de por vida

Desde 1983, en “Pastoral del Amor” se vela por la calidad de vida emocional, espiritual y física de las personas y las familias con niños, jóvenes y adultos que tienen una discapacidad intelectual media y severa, combinada con psicomotriz, visual y de lenguaje. Esto se logra a través de la Catequesis Especial, la Escuela para Padres y el Albergue San José.

El Albergue San José es un compromiso de por vida. Las 24 horas del día, los 365 días del año es un hogar permanente para personas que llegan de pequeños en situación de abandono, maltrato y orfandad; se les brinda atención especial y personalizada, alimentación, medicamentos especiales y rehabilitación en un ambiente cálido como en una familia, y en un hogar limpio adaptado a sus necesidades hasta que fallecen.

Gracias a la presencia de las hermanas de la congregación de Concepcionistas al Servicio de los Pobres, los chicos del Albergue San José tienen una presencia maternal y cercana siempre, además de que velan por el correcto funcionamiento de la institución.

Una de las necesidades constantes son medicamentos controlados, ya que se necesitan alrededor de $50 mil mensuales, de los cuales se cubre una parte gracias al apoyo del Hospital Psiquiátrico de Yucatán y otras donaciones. También se requiere de pañales para adultos, artículos de higiene personal y para la limpieza... Todo aquello que se usa en un hogar

David y Toño con otros integrantes del Albergue San José en sus primeros años

Como Sol y Marita, los pequeños que llegan al Albergue San José forman un vínculo de amor fraternal

David ensayando con Ana López Martín para el festival “Luz, Magia y Color” 2020

A Toño le gusta escribir figuras de secuencia y mandalas

David siempre ha disfrutado de bailar y convivir con todo el mundo