Diario de Yucatán - Suplemento Especial
Planifica tu horario de tareas
Todos los pendientes caben en una agenda sabiéndolos acomodar.
Siempre que se comienza un nuevo ciclo escolar pensamos lo mismo “esta vez me organizaré mejor y haré mis trabajos a tiempo”. Si bien siempre comenzamos con buen ritmo cumpliendo lo prometido, es muy común que al paso de los días esto cambie hasta regresar a lo mismo; hacer todo al último momento, revolverse con los pendientes, etcétera. Es por eso que en esta ocasión te diremos cómo puedes organizar mejor tu tiempo para cumplir con tus tareas escolares.
Cuando vamos de regreso a casa, lo menos que queremos hacer es continuar con las labores de la escuela; sin embargo, este es un esfuerzo extra que tienes que realizar, pues sus recompensas serán muchas. Piensa que al realizar los pendientes escolares recién llegando, te quedará mucho tiempo libre por la tarde.
Algo que debes de tomar en cuenta es no comenzar a hacer tus pendientes después de comer, ya que es común que cuando terminamos de alimentarnos nos dé un poco de sueño. Esto impedirá que estés bien concentrado.
Toma nota de lo que te presentaremos a continuación para poder planificar esos momentos de estudio.
Siempre en un mismo lugar
Antes de comenzar a planificar tus horarios de estudio debes escoger una libreta, agenda o incluso un pizarrón donde puedas borrar las tareas que vayas terminando. Una vez que hayas escogido el lugar donde día con día escribirás tus pendientes, harás columnas con los siguientes apartados: día de la semana, materia, trabajo a realizar y fecha de entrega. Así tendrás toda esa información mejor organizada.
Prioridades
Una vez que hayas anotado todas tus tareas escolares, debes pensar en el nivel de dificultad de cada una de ellas. De esta manera distribuirás mejor tu tiempo y podrás comenzar de en la manera que para ti sea más funcional; hay personas que prefieren comenzar con aquello más fácil de realizar o hay quienes prefieren darle prioridad a lo más difícil.
Tiempo
En la medida de lo posible, establece un horario igual o similar para cada día. Si haces tus tareas a la misma hora diariamente, la planificación se volverá parte de tu rutina. También, puedes ayudarte de una lista de tareas. Podrás revisarla mientras tomes café en la mañana o antes de dormir y así no perderás el hilo de tus pendientes por hacer.
Otra de las cosas que puedes hacer es destinarle tiempo a cada tarea y tratar de cumplir con ésta. Recuerda que debes programar tus actividades por horarios y no por listas de cosas por hacer, así tomarás más conciencia del tiempo que te lleva realizar cada tarea y podrás organizarte de una forma más realista.
Si no puedes cumplir con el horario, no te preocupes, simplemente aplázalo un poco, pero nunca postergues demasiado las cosas, ya que las tareas se te acumularán a medida que vas atrasando tus responsabilidades, y tu horario se atascará cada vez más.
Constancia
La mejor manera de ayudar la planificación y organización del estudio es perseverar. Así que, aunque al principio te resulte complicado, estudia todos los días, trata de cumplir las metas que te hayas marcado y respeta los horarios. ¡Verás cómo el trabajo da sus frutos!
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