Diario de Yucatán - Suplemento Especial
Detención de Ovidio desata violento caos
El 5 de enero, Sinaloa vivió una ola de violencia caótica tras de la detención de Ovidio Guzmán López, hijo de Joaquín “El Chapo Guzmán”, líder del conocido cártel mexicano que lleva su mismo nombre.
Se registraron diversos ataques y bloqueos en Culiacán como parte de la manifestación del cártel ante la captura de su líder. El resultado fue de 18 elementos heridos entre policías y militares.
Por otra parte, Luis Cresencio Sandoval, titular de la Defensa Nacional y jefe del Ejército, informó que la captura del capo se había hecho como parte de las facciones del cártel “Los Menores”, nombre que hace referencia a los hijos del narcotraficante, mismo que hoy se encuentra cumpliendo cadena perpetua en una cárcel de Estados Unidos.
Hace poco más de cuatro años, se intentó la captura del también apodado “Chapito” o “Ratón”; sin embargo, las fuerzas armadas mexicanas lo dejaron en libertad luego de que el Cártel de Sinaloa tomara a militares como rehenes y los ofreciera a cambio de su líder.
Ovidio Guzmán no solo era buscado por las autoridades mexicanas, sino también por las estadounidenses, que ofrecían una recompensa de cinco millones de dólares para dar con el paradero del narcotraficante, quien se encargó de distribuir cocaína, metanfetaminas y marihuana en Estados Unidos de 2008 a 2018.
Marcelo Ebrard, secretario de Relaciones Exteriores, dio a conocer que México recibió la solicitud de detención con fines de extradición en septiembre de 2019, misma que fue actualizada y procesada antes de la visita de Joe Biden al territorio mexicano.