CITA DEL DÍA
Señalan que hubo una baja, pero no fue un mal año
“Crecimos por debajo del potencial de crecimiento del PIB... y, sin embargo, podemos decir que no fue un mal año”.
CIUDAD DE MÉXICO (EFE).— México creció 2.3% en 2016, tres décimas menos que en 2015, un buen resultado en un año que arrancó difícil y se complicó aún más con la victoria de Donald Trump, pero que no salvaguarda al país de un 2017 que analistas prevén muy complejo.
“Crecimos por debajo del potencial de crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) de México y, sin embargo, podemos decir que no fue un mal año”, señaló la directora de Análisis Económico-Financiero de Banco BASE, Gabriela Siller.
El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) anunció ayer que el PIB aumentó 2.3% en 2016 respecto a 2015, impulsado por las actividades primarias (4.1%) y terciarias (3.4%), en tanto que el sector industrial se mantuvo invariable.
El país cerró 2015 con un crecimiento de 2.6% —en los datos ofrecidos ayer aumentaron una décima frente al pronóstico anterior—, mientras que en 2014 aumentó el 2.1% y en 2013 el 1.4%.
Para el subdirector de Economía Nacional del Grupo Financiero Banorte, Alejandro Cervantes, el positivo PIB de 2016 se atribuyó a la demanda interna de bienes y servicios.
No obstante, esta desaceleración frente al año anterior tuvo tres factores principales; la caída de la industria minera (6.4%), la contracción del gasto público y el freno a la demanda externa de Estados Unidos.
“Más del 40% de los bienes manufactureros que México produce se exportan a Estados Unidos, donde son utilizados como insumos en la cadena productiva”, explicó el economista.
Donald Trump ganó las elecciones en noviembre, y a pesar de la incertidumbre que detonó, la economía mexicana creció 2.4% interanual en el último trimestre, en términos reales.
A pesar del 2.3% de 2016, que muestra que la economía nacional tiene cierta resistencia y adaptabilidad, ambos expertos coincidieron en que el verdadero desafío arrancará este 2017.