Diario de Yucatán

Ya no tendrá que vender chicharron­es

Carlos se dedicará a estudiar sin más preocupaci­ones

- MARTÍN CHAC BACAB

TZUCACAB.— Carlos Andrés Balam Martínez, de 11 años de edad, ya no tendrá que preocupars­e por vender chicharron­es en la calle, porque su abuela empezó desde esta quincena a recibir un apoyo económico de la Comuna y al menor se le otorgará una beca de Prospera, con el compromiso de que se dedique a estudiar.

El domingo 28 pasado publicamos que Carlos Andrés es uno de los 10 nietos que viven con Zoila Moo Martínez, de 63 años de edad, en la calle 25 entre 36 y 40 de la colonia Esperanza. Al ser uno de los más grandes, aporta dinero a la casa con lo que gana vendiendo chicharron­es en las tardes, de lunes a viernes.

En esa ocasión, Carlos Andrés, quien en las mañanas asiste a la primaria Niño Artillero, comentó que seguirá estudiando porque quiere ser maestro.

—Antes de salir a vender tengo que hacer la tarea de la escuela, porque quiero pasar a la secundaria este año —agregó Carlos Andrés, cuya mamá falleció cuando él era un bebé y su padre los abandonó, quedando bajo la tutela de Zoila Moo.

Apoyo quincenal

Anteanoche lunes, durante una visita que realizaron autoridade­s municipale­s a la vivienda de Zoila Moo, encabezada­s por el alcalde Danny Balam Balam, se informó que cada quincena la mujer recibirá un apoyo económico para los gastos de sus 10 nietos que viven con ella, pero con el compromiso de que Carlos Andrés ya no salga a vender chicharron­es y vaya a la escuela.

Las autoridade­s también le pidieron a Zoila Moo que envíe a la escuela a Diego Balam, de 10 años, otro de sus nietos y quien dejó de estudiar porque reprobaba.

Por su parte, Zoila Moo agradeció a las autoridade­s porque casi al inicio de esta administra­ción la Comuna, por medio del programa Vivienda Digna de la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas (CDI), le construyó dos cuartos, sala, comedor y baño.

Ahora viven dos familias en ese predio, la mujer, sus nietos y una de sus hijas. La familia también recibió cobertores de las autoridade­s.

Carlos Andrés comentó que ahora le dedicará más tiempo a los estudios, pues ya no tendrá que preocupars­e por salir a vender.

Zoila Moo trabajaba para una empresa agrícola, pero se retiró por una pulmonía. Los interesado­s en apoyar a la familia de Zoila Moo los pueden contactarl­a al teléfono celular 99-93-69-3905—

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El menor Carlos Andrés muestra uno de sus trabajos escolares Debajo, uno de sus primos

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