Insisten, Marte no es habitable
Concentración de sales y exceso de radiación, su mal
MADRID (EFE).— El oxígeno no es suficiente para hablar de habitabilidad en Marte, según el investigador del Centro Español de Astrobiología (CAB) Alberto González Fairén, quien recuerda que hay otros factores que no permiten esa posibilidad en el planeta rojo: bajísimas temperaturas, radiación y alta concentración de sales.
Así se refiere este astrobiólogo al trabajo publicado en la revista “Nature Geoscience” por científicos de la NASA, que han desarrollado un modelo para calcular la cantidad de oxígeno que hay en aguas saladas bajo la superficie marciana.
Según la NASA, estas aguas saladas podrían albergar suficiente oxígeno molecular para sustentar la vida de microbios y esponjas.
Para Fairén, la hipótesis de partida del trabajo liderado por Vlada Stamenkovic es correcta: cuando el oxígeno es disponible para respirar, los seres vivos aumentan tamaño y complejidad.
“Esto lo sabemos porque los primeros animales en la Tierra pudieron ser precisamente esponjas que vivieron
hace 650 millones de años”, apunta el científico español, quien agrega que estas esponjas primitivas evolucionaron justamente como consecuencia de la primera acumulación significativa de oxígeno en la atmósfera terrestre, generada por las bacterias fotosintéticas.
Para Fairén, el artículo incluye “una comparación interesante”, pues los autores eligen el grupo de organismos terrestres que son capaces de vivir a concentraciones de oxígeno en agua baja.
A partir de ahí, concluyen que las concentraciones de oxígeno calculadas que pueden existir en las salmueras marcianas serían suficientes para que estos organismos pudieran medrar en Marte hoy.
El oxígeno no es suficiente para hablar de habitabilidad en Marte, según el investigador del Centro Español de Astrobiología (CAB) Alberto González Fairén, quien recuerda que hay otros factores que no permiten esa posibilidad en el planeta rojo: bajísimas temperaturas, fuerte radiación y alta concentración de sales.
Por un lado, esta investigación —que damos a conocer en la primera página de esta sección, que proporciona la agencia EFE— no entra a fondo en el problema de la habitabilidad, que es multifactorial, es decir, “los posibles habitantes de las salmueras no sOlo dependerían del oxígeno disponible para respirar”.
En este sentido, Fairén recuerda que hay otros factores que no permiten la existencia de vida similar a la terrestre cerca de la superficie de Marte hoy: fundamentalmente bajísimas temperaturas, la altísima concentración de sales y radiación.
Por lo tanto, agrega, “es complicado proponer que las salmueras marcianas son habitables por formas de vida similares a las terrestres solamente porque son capaces de absorber cierta concentración de oxígeno, sin computar las demás variables”.
El otro problema es que, a juicio de Fairén, el modelo presentado no resuelve cómo explicar la existencia misma de las salmueras que atrapan el oxígeno.
Los autores dan por hecho que Marte puede esconder salmueras en distintos lugares en la actualidad y especialmente a poca profundidad en las zonas polares, pero “esta es una asunción muy arriesgada”, indica.
Fairén explica que las observaciones directas con “landers” y “rovers” no apoyan esta posibilidad: aunque algunos modelos parecen predecir que, en efecto, pueden existir salmueras en diversos lugares, esos mismos modelos aseguran que sOlo estarían líquidas durante algunas horas y por la noche, cuando la humedad relativa es mayor y la temperatura alcanza valores mínimos.
“Hay tan poco oxígeno en Marte que hay que hilar muy fino para plantear trabajos que estudien la disponibilidad del oxígeno para los seres vivos”, subraya Fairén, quien concluye: los modelos del artículo parecen correctos, sus implicaciones son escasas y poco relevantes.