Pago de soborno, “asunto común”
Aumenta índice de corrupción en gobiernos locales
Una encuesta del Inegi revela que nueve de cada 10 adultos consideran que la corrupción es un “asunto común” entre los empleados de los gobiernos estatales.
El organismo informó que en 2017 la tasa de incidencia de corrupción fue de 25,541 delitos por cada cien mil habitantes.
Con respecto a las empresas, 247,267 establecimientos fueron víctimas de corrupción el año pasado, cuando la prevalencia de esa práctica aumentó significativamente. De acuerdo con el sondeo, la corrupción estuvo presente en el 5.4% del total de los establecimientos.
Los ámbitos donde hubo mayor frecuencia de actos de corrupción fueron en la interacción con autoridades de seguridad pública y en los trámites relacionados con el acceso a la justicia.
CIUDAD DE MÉXICO (EFE).— Nueve de cada diez mexicanos que viven en áreas urbanas consideran que la corrupción es una “práctica frecuente” entre los servidores públicos, quienes buscan obtener beneficios personales como “dinero, regalos o favores”, informó ayer el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
No obstante, a la hora de preguntar si han sido víctimas de, al menos, un acto de corrupción, únicamente 14.6% de los que tuvieron contacto con funcionarios a lo largo de 2017 contestaron de forma afirmativa.
“La tasa de incidencia de corrupción fue incluso más alta que la tasa de incidencia delictiva de robo en calle o transporte público”, apuntó el Inegi con motivo del Día Internacional contra la Corrupción, que se celebra el 9 de diciembre.
La cifra aumentó desde 2013, cuando 12.1% de los encuestados dijeron haber atestiguado un acto de corrupción. Además, el 5.4% de los establecimientos comerciales sufrieron este delito.
Los trámites en los que los ciudadanos vieron más corrupción fueron los vinculados con autoridades estatales, sobre todo los relacionados
con la propiedad y los trámites vehiculares.
El Inegi aseveró que “la corrupción es un acto que en México no se denuncia”, y que durante el pasado año únicamente 4.6 % de las personas que fueron víctimas de este delito lo reportaron ante alguna autoridad.