Del fútbol a las carreras
Une “Misterio a bordo” a Sandler y a Luis Gerardo
Luis Gerardo Méndez es piloto de Fórmula Uno en la película “Misterio a bordo”, estreno de Netflix.
CIUDAD DE MÉXICO (AP).— Adam Sandler y Luis Gerardo Méndez hablaron de su interés en las historias enigmáticas y el desafío que el primero afrontó para interpretar a un piloto de Fórmula Uno durante el estreno en México de “Misterio a bordo (Murder Mystery)”.
La cinta de Kyle Newacheck, de Netflix, presenta a Sandler como el policía Nick Spitz de Nueva York, quien se hace pasar por detective y por azares del destino termina con su esposa (Jennifer Aniston) en el yate de un multimillonario septuagenario en que también está de viaje el piloto de carreras Juan Carlos Rivera (Méndez).
Sus destinos se cruzan cuando el millonario muere a bordo en circunstancias escabrosas y justo antes de firmar su testamento.
La cinta tiene varias referencias a historias de misterio como “Un cadáver en la biblioteca” y “Asesinato en el Expreso de Oriente”, de Agatha Christie.
“Cuando era niño las leía, me gustaban, no me encantaba tratar de descubrir quién era el culpable porque nunca lo adivinaba bien, pero disfrutaba tratar de descubrirlo”, dijo Sandler.
Por su parte, Méndez admitió que no era admirador de las novelas de misterio, pero de pequeño jugaba Clue, el juego de mesa para adivinar quién es el asesino. Las escenas del actor en un auto de Fórmula Uno se rodaron en el tiempo real del Gran Premio de Mónaco.
“Fue muy divertido filmar en Mónaco en el Gran Premio, porque filmamos en la carrera. Estuve en los pits con Lewis Hamilton, con Checo Pérez... y sí fue muy divertido traer el uniforme de McLaren, la gente me pedía fotos y demás”, recordó el actor sobre su experiencia al lado de esos famosos pilotos de la vida real.
Sin embargo, cuando llegó el momento de entrar en los angostos autos con el casco y los cinturones de seguridad —porque son varios—, la alegría del momento dio paso a los nervios.
“No podía respirar y me dio un ataque de pánico en el coche, fue horrible”, confesó el actor. Afortunadamente, Méndez logró proyectar seguridad en la película y luce como todo un profesional de las carreras de autos.