El llamado de Beckham, clave
Monterrey tomaría acciones legales por la venta de Pizarro
Antes de salir de México para concretar su fichaje con el Ínter de Miami, Rodolfo Pizarro declaró que la decisión de rescindir su contrato con el Monterrey fue motivada en parte por contactos que sostuvo con David Beckham, copropietario y presidente de operaciones del club de la MLS.
Hay un problema con eso. El reglamento de transferencias de la FIFA prohíbe tal contacto. Y el Monterrey analiza si deberá proceder legalmente, dijo ayer su presidente deportivo Duilio Davino.
Pizarro se desvinculó de los
Rayados para jugar con el equipo de expansión de la liga de Estados Unidos, que pagó una cláusula de rescisión de contrato que habría rondado los 12 millones de dólares.
Pero la declaración de Pizarro antes de partir a Miami podría tener consecuencias legales.
“(Beckham) habló conmigo en videollamadas”, dijo Pizarro a reporteros en el aeropuerto de Monterrey, al norte del país. “Me dijo que quería contar conmigo. Desde que me llamó influyó mucho para que tomara mi decisión.”
En el apartado quinto del artículo 17 del reglamento sobre estatuto y transferencia de jugadores de la FIFA, se consigna que se sancionará a cualquier persona sujeta a los reglamentos del organismo rector del fútbol mundial que “actúe de cualquier forma que induzca a la rescisión de un contrato entre un jugador profesional y un club con la finalidad de facilitar la transferencia del jugador”.
Como dirigente y codueño del Ínter de Miami, Beckham está sujeto a las ordenanzas del reglamento FIFA.
“Me preocupa el tema de la videollamada, si Beckham... no sé si pertenece o no a la directiva, pero él no podría hablar con jugadores que tienen contrato”, dijo Davino en entrevista con la cadena Fox Sports. “No es algo injusto, es contra el reglamento y ya está en manos de los abogados, yo no sé cómo va a reaccionar el club”.
Monterrey todavía no ha emitido una postura sobre la declaración de Pizarro, quien tomó por sorpresa al medio local con su decisión.