Familia pasa horas en la playa
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PROGRESO.— Tras estar poco más de 100 días cerrada al público por la pandemia de Covid-19, la playa incluyente del malecón fue reabierta ayer viernes durante unas cinco horas para que una familia se bañe en el mar, bajo la vigilancia de rescatistas y paramédicos municipales.
La playa incluyente, ubicada enfrente del parque de La Paz en el malecón, al igual que todas las playas del municipio fueron cerradas el 22 de marzo por la pandemia.
Ese día, el Ayuntamiento colocó vallas metálicas en las esquinas de la calle 21 que son accesos al malecón.
Pero ayer a las 7 a.m. reabrió el módulo de la playa incluyente, que cuenta con dos palapas; el personal colocó camastros y dispuso de sillas acuáticas.
En el lugar estuvo una familia, al parecer de Mérida, que llegó a bordo de un vehículo particular.
También estuvo personal que atiende el módulo de la playa incluyente, que es para gente con discapacidad.
Además, rescatatistas y paramédicos municipales estuvieron al pendiente.
No se permitió el acceso de más personas.
La familia se bañó en el mar durante un rato.
Un elemento del equipo de rescate municipal no permitió que se entreviste a las personas que estaban en la playa ni a los encargados del módulo de la playa incluyente, e indicó que no estaba permitido el acceso a esa área pública.
En la caseta de la Policía Turística, un oficial dijo que hasta donde sabía, la familia pidió al Ayuntamiento permiso para estar en la playa y bañar en el mar a una menor que está delicada de salud.
Al mediodía la familia se retiró de la playa.—