Un llamado estéril
Petición a los senadores por la reforma eléctrica
Horas antes de que el Senado avalara la reforma energética aprobada previamente por la Cámara de Diputados, el Centro Empresarial de Mérida (Coparmex Mérida) y la delegación local de la Cámara Nacional de la Industria de Transformación (Canacintra) habían solicitado a los tres senadores por Yucatán que votaran contra las modificaciones.
Por separado, ambas cámaras insistieron en que la reforma tendría graves consecuencias económicas, sociales, ambientales y de salud y atenta contra la libre competencia.
La Canacintra advirtió que esa modificación pondrá a Yucatán “en una situación mucho peor que en la que nos encontramos”, pues se elevará el costo de generación de energía eléctrica.
Los organismos de la iniciativa privada expusieron sus llamados a los senadores Verónica Noemí Camino Farjat, quien hace unos días renunció a la bancada del PVEM para sumarse a la de Morena; Jorge Carlos Ramírez Marín, del PRI, y Raúl Paz Alonzo, del PAN.
Coparmex Mérida lo hizo en un comunicado de prensa. Canacintra envió cartas firmadas por su presidente, Jorge Abel Charruf Cáceres, a cada legislador.
Finalmente, como indicamos en la sección NacionalInternacional, la mayoría de Morena y sus aliados aprobó la reforma. La senadora Camino Farjat votó a favor; Ramírez Marín y Paz Alonzo lo hicieron en contra.
“De aprobar los senadores la reforma se eliminaría la lógica de eficiencia con la que actualmente se despacha la energía más barata en el mercado... La consecuencia sería un incremento de por lo menos el 17 por ciento en la tarifa de todos los consumidores”, indicó Coparmex Mérida por la mañana.
Y agregó: “Desde Coparmex preguntamos a los senadores: ¿qué es más barato y menos contaminante para generar energía eléctrica? ¿el aire y el sol o el combustóleo? La respuesta es la siguiente: el despacho a la energía termoeléctrica producida por la CFE tiene un costo de generación cinco veces mayor que la generación de energías limpias por empresas privadas”.
Coparmex anticipó que si el Senado ratificaba la reforma México quedaría en desventaja competitiva y habría impugnaciones a la ley, pues hay señales de desacuerdo internacional.
“Si queremos que México tenga una economía de bienestar es necesario que se pague menos por los servicios”, enfatizó. “Para mantener los precios como se encuentran ahora se requerirá de subsidios que serán absorbidos por los ciudadanos por medio de impuestos y otros esquemas”.
En las cartas que envió a los tres senadores con la firma de su presidente Charruf Cáceres, Canacintra Yucatán recalcó que esta cámara siempre ha participado activamente en todo lo relacionado con las tarifas eléctricas, pues Yucatán tiene las más altas del país.
También señaló que la reforma privilegia las energías más caras, sucias y contaminantes sobre las generadas de manera limpia, barata y, sobre todo, renovable.
Insistió en que usar combustibles fósiles, como combustóleo y diesel, para generar electricidad traerá como resultado un aumento en las tarifas o una tarifa subsidiada con los impuestos de todos los mexicanos.
Incluso, citó los siguientes datos de la Comisión Reguladora de Energía sobre los costos unitarios promedio para la generación de un megawatt en 2020:
En plantas térmicas el costo fue de $1,663; en plantas de ciclo combinado, $1,201; en hidroeléctricas de gran escala, $976; en hidroeléctricas de pequeña escala, $887, y en energía eólica, fotovoltaica y geotérmica, $404.
Lo que generará la modificación a la ley, apuntó, es pagar megawatts de $1,663 en lugar de $404, el cuádruple.—