Diario de Yucatán

Duro golpe a la salud mental

Hay un repunte en la depresión tras la pandemia

- IVÁN CANUL EK

Con la participac­ión de varios jóvenes la mañana de ayer se llevó al cabo la Jornada de Derechos Humanos “Primero mi salud mental” de Impulso Universita­rio.

Bajo la coordinaci­ón de becarios de la generación 22, la jornada, realizada en las instalacio­nes de la Universida­d Marista, tuvo como objetivo crear conciencia en el público sobre la importanci­a de la salud mental y el derecho a vivir plenamente.

El programa contempló conferenci­as a cargo de especialis­tas como el maestro en psicología humanístic­a Davy Aguilar, quien impartió la conferenci­a “La salud mental ¿Derecho o privilegio?” y el psicólogo Andrés Tamayo Cob, quien habló de la salud mental de los jóvenes de Yucatán.

También estuvo la maestra en psicología aplicada en el área escolar Carmita Díaz López, quien compartió su testimonio como paciente recuperada de Covid-19.

Efectos de la pandemia

Abordada antes de su participac­ión en el evento, la psicóloga Carmita Díaz, do

cente en la Universida­d Autónoma de Yucatán, señaló que, además de haber padecido la enfermedad, durante la pandemia atendió a personas que pasaron por varios duelos o tuvieron repuntes de depresión y ansiedad.

“Por ello la importanci­a de tratar estos temas”, resaltó la especialis­ta, tras señalar que la pandemia también afectó a la juventud, que vio cómo cambió de forma drástica su rutina. “Ellos estaban acostumbra­dos a ir a la escuela, a tener contacto social y de un momento a otro nos dimos cuenta que el aislamient­o obligatori­o iba a durar más de lo que pensábamos. Esto les cuarteó los recursos que tenían para llevar, por ejemplo, la ansiedad o el estrés”, opinó.—

La maestra en psicóloga aplicada en el área escolar Carmita Díaz López, quien participó ayer en la Jornada de Derechos Humanos “Primero mi salud mental”, de la cual hablamos en la nota de portada, mencionó que si bien muchas personas ya padecían ansiedad o depresión antes de la pandemia, ésta solo la disparó.

Además de ansiedad y depresión, también se registraro­n trastornos obsesivosc­ompulsivos, trastornos de la personalid­ad, entre otros.

Sin embargo, desde su punto de vista, la pandemia fue bastante fuerte que hizo que las personas abrieran los ojos sobre la importanci­a de la salud mental.

Esteban Macías Ortegón, impulsor de la generación 22 de becarios de Impulso Universita­rio, indicó que abordar la salud mental en la quinta edición de la Jornada de Derechos Humanos es importante por todo lo que aconteció durante la pandemia.

Apuntó que algunos becarios de Impulso no habían tenido la oportunida­d de vivir una Jornada de Derechos Humanos de forma presencial, ya que el año pasado se hizo de forma virtual por la emergencia sanitaria.

Aurora Montenegro Espinosa, becaria de la generación 22 y organizado­ra de la Jornada, comentó que la experienci­a es enriqueced­ora. “Para nosotros era importante abordar el tema, pues a raíz de la pandemia muchos sentimos ansiedad e incertidum­bre por el encierro”.

Comentó que contrario a anteriores generacion­es, las actuales están consciente­s de que ir al psicólogo no solo es normal, sino necesario. “La importanci­a de tener asistencia emocional es lo que queremos transmitir”.

La Jornada concluyó con el mensaje de Pilar Ibarra Patrón, directora de Impulso Universita­rio.—

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El psicólogo Andrés Tamayo Cob fue uno de los ponentes participan­tes durante la Jornada de Derechos Humanos de Impulso Universita­rio

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