Respuesta de Facultad
Aborda queja de maestra por un lío en Derecho
La Facultad de Derecho de la Uady informó que, por tratarse de un asunto laboral interno y para proteger los derechos de las personas involucradas en los hechos, se había abstenido de hacer algún pronunciamiento a la opinión pública relativo a la queja de presunta violencia de género, hostigamiento y acoso que denunció una docente de la casa de estudios.
En un boletín indicó que “en virtud de que la propia protagonista ha divulgado en medios de comunicación y en redes sociales información parcial en torno a su queja y propició incluso una manifestación de alumnas y alumnos de esta Facultad, exponemos aquí los hechos, así como los procedimientos realizados al respecto, que desmienten las falsedades vertidas en torno a este caso”.
Entre otras cosas, la Facultad afirmó que el asunto inició a fines de agosto de este año, cuando personal de la Prefectura de esta Facultad acudió a uno de los salones de clase donde los estudiantes estaban inquietos ante la ausencia de su maestro, no obstante de que en la libreta de entradas y salidas aparecía que el docente registró su ingreso.
Dada la recurrencia de esta situación, el personal lo comunicó a la Dirección de esta Facultad. Enterado del caso, el director Carlos Macedonio Hernández giró instrucciones al secretario administrativo, licenciado Jorge Rivero Aguilar, para que se ocupara del caso y realizara las investigaciones pertinentes. El funcionario revisó la libreta de registro y los videos de control de la Prefectura y detectó que en diversas ocasiones aparecía el registro de ingreso de dos maestros ausentes.
Asimismo, en las cámaras de seguridad se observó que la Licenciada Glendy Aguilar Mena era quien llegaba y registraba la asistencia de aquellos, quienes aparentemente registraban su asistencia de manera inmediata a la llegada de ella. Esta situación motivó que la Facultad iniciara un procedimiento para confirmar la presunta irregularidad.
Pruebas
Una vez confirmada la irregularidad con las pruebas documentales que hasta ese momento se tenían, entre las que se encontraban las videograbaciones y los controles de asistencias, la Dirección de la Facultad le pidió al secretario administrativo que hablara con la Licenciada Glendy informándole de esa investigación previa y la exhortara a que si había cometido esas irregularidades se abstuviera de continuar con dichas acciones. Y que, de hacer caso omiso, podría ser acreedora a una sanción administrativa, tal como establece el contrato colectivo de trabajo para este tipo de conductas. Esto ocurrió el 6 de septiembre.