La realeza desmentirá su historia
Analizan el arte neerlandés que viene de colonias
LA HAYA (EFE).— La fundación que gestiona el patrimonio de la Casa Real de Países Bajos ha encargado una investigación independiente sobre el origen colonial de las obras y objetos de arte de su colección para determinar “la legalidad y equidad de la gestión” de estas piezas por la familia real, en pleno debate sobre el arte saqueado.
La Fundación de Colecciones Históricas de la Casa de Oranje-Nassau, presidida por la reina Máxima, encargó un estudio independiente sobre la procedencia de los objetos coloniales de la familia real.
La investigación la llevará al cabo durante un año y medio un comité presidido por Rudi Ekkart, quien es historiador de arte y expresidente del Instituto Neerlandés de Historia del Arte.
Ekkart ya realizó una investigación sobre la procedencia de las obras de arte saqueadas durante la Segunda Guerra Mundial y formó parte anteriormente de un comité que investigó los objetos artísticos e históricos que pasaron a ser propiedad de la Casa Real desde 1933; entre ellos había una obra robada a sus propietarios judíos por los alemanes.
Una investigación publicada el pasado septiembre por el Museo de Ámsterdam mostró que el Carruaje Dorado, una polémica carroza decorada con una mujer blanca y esclavos depositando regalos a sus pies y que pertenece a la familia real de Países Bajos, está bañada en oro procedente de una mina de la excolonia neerlandesa del Surinam.
El debate sobre este panel llevó al rey Guillermo Alejandro a renunciar al uso de la carroza en ocasiones oficiales, instando a “aceptar” el pasado colonial porque “no se puede reescribir”.
Esta investigación llega en un momento en el que países e individuos están tratando de recuperar piezas antiguas y artísticas que, a lo largo de la Historia, se han distinguido por ser saqueadas.