Eknakán, un multidestino
Amplia oferta de servicios turísticos y empresariales
La hacienda Eknakán y su iglesia gótica son ahora un multidestino de servicios turísticos, empresariales, culturales y sociales, que las hacen una alternativa completa para la realización de eventos de toda índole.
La mágica combinación hacienda turística-iglesia católica, que tiene autorización eclesiástica para la celebración de ceremonias religiosas como bodas, forman una dupla perfecta para toda celebración o evento.
En sus orígenes, San José Eknakán era una hacienda forrajera, ganadera y de producción de granos, que posteriormente se sumó a la producción del henequén. No obstante, ahora cuenta con nueva vocación: “que los visitantes vivan la mejor experiencia de sus vidas porque la hacienda San José Eknakán es el lugar que lo tiene todo”, explica el promotor de este proyecto, abogado Allan Molina Álvarez.
Entre sus atractivos figura la Unidad de Manejo para la Conservación de Vida Silvestre, especializada en aves originarias de Yucatán, autorizada por la Semarnat.
El principal objetivo de esta UMA es servir de santuario a distintas especies de animales, especialmente aves. Además, el proyecto se encuentra en un programa de conservación y reintroducción de las mismas a sus hábitats naturales en conjunto con las autoridades pertinentes y también a través de la Asociación de Ganaderos Diversificados Productores de Flora y Fauna Silvestre de Yucatán.
Otro de sus atractivos para visitar y conocer son tres cenotes (Caracol, Papakal y Kubá), todos con aguas cristalinas y bóvedas espectaculares.
La hacienda San José Eknakán estará dedicada a eventos sociales, ofrecerá tours que incluyen la visita a la iglesia y a los jardines creados en la laguna de oxidación del bagazo del henequén, lo que crea un microclima que disminuye hasta en tres grados la temperatura de calor.
La explanada de césped al aire libre tiene un aforo de 4,000 personas y puede servir para eventos artísticos, musicales y desfile de modas. En la parte posterior hay otra instalación con capacidad para 250 personas y estará dedicada a eventos sociales, artísticos medianos y para todo lo que quieran organizar los arrendadores.
Sumado a esto, la hacienda tiene adjunta la iglesia de estilo neogótico.
Es justamente el que cuente con una iglesia tan cercana lo que hace que sea ideal para la realización de bodas, como bien refiere el entrevistado al explicar cuál es el problema que afrontan muchas de las personas que realizan este tipo de eventos.
Según comenta, los que realizan estos eventos suelen llevar al cabo la ceremonia religiosa en Mérida y luego tienen que transportar a los invitados a la hacienda donde será la fiesta. Algunas haciendas tienen capilla, pero no están consagradas o no tienen autorización para celebrar ceremonias religiosas y los sacerdotes no pueden oficiar una misa.
Ese problema se resuelve con la atractiva iglesia neogótica de la hacienda, ya que “tiene capacidad para 120 feligreses y cuenta con una autorización para que se celebren misas católicas hasta el día de hoy”, explica.
Sobre la iglesia, el abogado Molina Álvarez destaca que “empezaron a construirla a principios de 1890 y se terminó a finales de los años 90 del siglo XIX. Es una iglesia, no es una capilla”.
Además, posee un entorno natural de pasto y árboles nativos con una antigüedad de setenta a más de un centenar de años.
El terreno de la hacienda San José Eknakán tiene capacidad para el estacionamiento de cien vehículos en su interior.
Acceso al público
La hacienda Eknakán ya está abierta al público y recibe a grupos de familiarización de Estados Unidos y de Europa. Desde el jueves pasado, los tours operadores promueven entre sus clientes los multiservicios turísticos, empresariales, culturales y sociales y como destino de bodas. Sin embargo, cualquier persona puede rentar estas instalaciones espectaculares.
“Tenemos piscinas para cada evento, una sala climatizada para 100 personas, ideal para seminarios o reuniones empresariales, tenemos unas cavas, un catering completo. Cuando alguien quiera celebrar una boda, aquí tienen la iglesia y el lugar perfecto”, subraya el entrevistado.
El abogado Molina Álvarez precisa que él no ve esta cuantiosa inversión en el rescate de la iglesia y la hacienda como un negocio, sino más bien pretende conservar el legado familiar, que tiene una rica historia arquitectónica, económica y social de siglos pasados.
La noche del jueves 29 de febrero pasado, tanto la iglesia como la hacienda lucieron en su máximo esplendor por su renovada construcción, iluminación artística y su nueva vocación: un multidestino de servicios.
A partir del corte del listón inaugural del proyecto, que hicieron los socios de este histórico complejo turístico y social, señores Allan Molina Álvarez, Carlos Abraham Mafud, Víctor Gómez Rodríguez, Michael Mayo Macke y Allan Molina López, la hacienda San José Eknakán, asentada en el municipio de Cuzamá desde hace varios siglos, ofrece sus servicios por medio de tour operadores de Yucatán.
Sobre el desarrollo de este proyecto, Molina Álvarez detalla que la primera fase de este complejo de multidestinos consistió en los servicios de la iglesia neogótica del siglo XVIII y las instalaciones de toda la hacienda completamente rescatadas en su originalidad.
Ayer y hoy
“Compré la hacienda junto con tres socios más en 2018. La recibimos prácticamente en ruinas. Se puede ver en un vídeo que se proyecta el ayer y el hoy de esta hacienda”, informa. “Las obras de restauración de la iglesia tardaron dos años y el rescate de la hacienda fue un poco más, porque lo hicieron con mucho cuidado, dedicación y empeño. La casa de máquinas estaba en el abandono, se hizo una restauración completa; la casa del administrador se convirtió en tres habitaciones de lujo; la casa principal, donde vivía la familia Molina-Hübbe, será la siguiente etapa de la restauración e incluirá una mezcalería y restaurante”.
¿Se siente orgulloso de haber recuperado el esplendor de esta hacienda?
“Claro que sí, es una satisfacción muy grande”, remató antes de que, junto con sus socios, cortara el listón inaugural y empezara la fiesta de celebración con un centenar de invitados de los socios del proyecto.
Allan Molina Álvarez es copropietario de la hacienda Eknakán y es el líder del proyecto; su hijo Allan Felipe Molina López es el director general del proyecto turístico.—