Se vinculan al microbioma La ausencia de ciertas bacterias fue relacionada a un futuro diagnóstico de trastornos del desarrollo neurológico
MIAMI (EFE).— Ciertos cambios en el microbioma intestinal infantil pueden presentar una correlación con futuros diagnósticos de trastornos del desarrollo neurológico como autismo y TDAH (trastorno por déficit de atención e hiperactividad), según un informe divulgado por la Universidad de Florida (UF).
El estudio, el primero de su tipo, arroja que los cambios en el microbioma infantil (microbios que colonizan el tracto intestinal y desempeñan un papel importante en el desarrollo del sistema inmunitario y la salud) muestran una correlación con futuros diagnósticos del trastornos de neurodesarrollo.
Para el estudio se emplearon datos acumulados durante 20 años de 16,440 niños. De este total de menores, 1,197, equivalente al 7.28%, desarrollaron algún trastorno del neurodesarrollo.
En los análisis de los primeros cinco años de vida de los niños se examinaron factores biológicos y ambientales que podrían influir en la presencia, disminución o ausencia de ciertas bacterias vinculadas al desarrollo de condiciones como el autismo, el TDAH, la discapacidad intelectual y los trastornos del habla.
El equipo de investigación encontró “diferencias importantes en los microbiomas intestinales de los bebés que luego recibieron diagnósticos de trastornos del desarrollo neurológico”. Éstos diferían según el diagnóstico, pero también se observaron patrones comunes, señala el estudio.
Muchas bacterias que promueven la salud intestinal, incluidas Akkermansia, Bifidobacterium, Ruminococcus y Faecalibacterium, “eran deficientes” en infantes con diagnósticos futuros de trastornos del desarrollo neurológico.
Uno de los hallazgos más sorprendentes del estudio fue la correlación encontrada entre “los trastornos del desarrollo neurológico y el tratamiento de infecciones de oído mediante el uso de antibióticos como la penicilina” en la primera etapa de la infancia.