Gira y guardia, con disputas
GUARDIA NACIONAL. La integración del nuevo cuerpo de seguridad propuesto por AMLO, que reclutará elementos del Ejército, de la Marina y de la Policía Federal, ya fue aprobada en la Cámara de Diputados, falta su debate en el Senado. Subsisten dudas sobre la efectividad que tendrá la estrategia de militarización que se propone con la Guardia Nacional, como órgano rector en el combate a la inseguridad del país, porque la militarización en México (y en Sinaloa) no ha generado la paz ni la seguridad debida, y sí, en cambio, se han documentado casos de abuso de autoridad y violación de derechos humanos por tropas del Ejército y Marina.
Desde el gobierno de Vicente Fox se empezó a extender la intervención de la milicia en el combate al crimen, con Felipe Calderón se reforzó esa estrategia, y Peña Nieto siguió el mismo modelo; AMLO lo ampliará al proponer una reforma constitucional para generar un nuevo cuerpo de seguridad integrado con miembros del Ejército y Marina, y bajo mando mixto que integrará consejo militar y mando civil. Organismos defensores de derechos humanos alertan que no es una estrategia correcta la militarización, México ha sido observado desde instancias internacionales precisamente por la violación de los derechos humanos en manos del Ejército, y hay temor de que esas violaciones se profundicen con la Guardia Nacional; además, preocupa que la seguridad que se busca no se encuentre, porque el Ejército ya ha tenido bajo se responsabilidad el combate al crimen en los últimos 12 años y, en vez de disminuir, ha aumentado la narcoviolencia y delincuencia ¿O no?
Cierto, este es un nuevo gobierno federal que se ha comprometido a combatir la corrupción, pero los militares y los marinos que se reclutarán para la Guardia Nacional son los mismos que ya han actuado en anteriores operativos. ¿O no?
DIVISIÓN EN FAMILIA. El debate ahora es para dilucidar quiénes son los verdaderos morenistas y quiénes no, ya que entre legisladores locales se acusan de ser impostores, de no ser auténticos de Morena, de no seguir la “línea de AMLO” o de alinearse al gobierno de Quirino. Han subido de tono sus acusaciones, los señalamientos y sus divisiones, en vez de arreglarse se confrontan más, y eso a ambos bandos los desgasta y debilita su proyecto.
Es muy temprano para que las aspiraciones del 2021 los dividan, la percepción que están dejando es que no tienen madurez para gobernar, menos para acordar y concertar sus diferencias, porque ni siquiera son capaces de dialogar internamente.
El ambiente que encontrará AMLO en su visita a Sinaloa es de polaridad interna, el presupuesto del 2019 es el pretexto, en realidad las diferencias entre legisladores locales vienen desde antes del presupuesto y tienen otro origen, vinculado a alineaciones internas, a la disputa por la dirigencia de Morena y las precandidaturas al gobierno del estado. ¿O no? AMLO llegará por el sur. El primer territorio que visitará es Mazatlán, con el Químico Benítez, con quien se sabe que mantiene una cercana amistad; luego visitará Culiacán, Mocorito y Guasave. Trabajadores de la salud y la educación se han convocado para hacerse presentes en la gira y demandar al gobierno federal la solución a sus conflictos, ya que son sectores donde la federación aporta el 90 por ciento de los dineros para trabajadores.
Es probable haya reclamos. El coordinador de delegaciones Jaime Montes es señalado por algunos como “traidor”, también el gobernador estará de anfitrión, y seguro también reciba reclamos. ¿O no?