Exigen al INBA que no haya despidos masivos
Trabajadores piden a las autoridades que se respeten los acuerdos laborales y solicitan tener cautela con nuevos nombramientos
Trabajadores de la coalición del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura pidieron ayer que no haya despidos masivos, que se respeten los acuerdos laborales y sindicales, así como a las negociaciones salariales y de prestaciones del 2019.
µ Sucesos
Francisco Albarrán Villanueva, secretario general del Sindicato Nacional Independiente de Trabajadores del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (Sinitinbal), explicó que el grupo de alrededor de 100 empleados se encontraban en la explanada de Bellas Artes para exigir sus derechos laborales como sindicalizados, y también los de otros trabajadores que no son de base. “Nosotros también apoyamos a los compañeros del Capítulo 3000, siempre y cuando sean compañeros operativos, porque Capítulo 3000 son mandos medios y superiores con nombramientos, que son los que cobran 50 mil pesos mensuales pero que no asisten a sus labores. Los trabajadores por nombramiento son una estructura de personal de confianza que cobra una cantidad excesiva en recursos y a veces ni asisten a trabajar”, dijo Albarrán.
µ Planes
El secretario general del Sinitinbal adelantó que el día de ayer tendrían una reunión con Alejandra Frausto, secretaria de Cultura federal, a las 18:00 horas, en Arenal 40, sede de la Secretaría en la Ciudad de México, adonde planean llegar con un pliego petitorio en el que expondrán sus inconformi-
dades y que dependiendo de las respuestas tomarán sus siguientes acciones. Albarrán Villanueva indicó que entre las inconformidades está el presupuesto cultural destinado para el ejercicio fiscal 2019, pues “no hubo sensibilidad social y política ni en el Ejecutivo federal ni en el Poder Legislativo para que se hubiera asignado el 1 % del Producto Interno Bruto, tal y como lo tiene establecido la Unesco para el rubro de la cultura, quizá como ya nos hemos manifestado muchas veces, creo que nos traen de encargo”. Los trabajadores permanecieron alrededor de una hora en la explanada de Bellas Artes y antes de retirarse colocaron una manta en la entrada del recinto, la cual, originalmente, fue pensada para ser colgada en el balcón central; sin embargo, las autoridades del Palacio no se lo permitieron.