¿Las leyes y los animalistas están a favor o en contra de nuestra fauna?
De unos años para acá grupos de “animalistas” radicales se han dado a la tarea de cuestionar la existencia de zoológicos.
Aunque la conservación y manejo de fauna silvestre es un tema desconocido para la mayoría de los grupos de “expertos y críticos por computadora ”, lo grave es que los legisladores los tomen como asesores.
Esta situación se torna de gran interés para los buscadores de votos, pues saben que este tipo de “animalistas radicales” en lo que sí son unos verdaderos ases es en el manejo de redes y medios de comunicación, por lo que sus propuestas llegan a resultar muy populares y rentables para ganar capital político. Lamentablemente el bienestar de la fauna, a unos y a otros, es lo que menos les importa. En 2014 el diputado Jesús Sesma, el Partido Verde Ecologista, asesorado por Antonio Franyuti de la ONG Animal Heroes, impulsó la reforma a la Ley General de Vida Silvestre para prohibir la exhibición de animales en los circos, pero jamás contempló lo que sucedería con más de cuatro mil animales que ahí vivían. En dicha ley no se consideró la creación de espacios para su conservación, simplemente dijeron que serían enviados a santuarios, pero dichos espacios solo existían en sus mentes, por lo que el destino de casi todos los ejemplares fue fatal.
Tampoco se tiene una legislación adecuada para que la Fiscalía General de la República dé el trato requerido a los animales que decomisan, y ante la falta de expertos son tratados como artículos y un gran número termina muriendo.
Durante la pandemia se han acentuado los problemas de animales abandonados y los zoológicos han recibido muchos, y me pregunto: ¿dónde están los grupos de animalistas, los artistas que a través de sus redes cacarean su profundo amor por los animales? ¿Dónde están los políticos y diputados que impulsan iniciativas de bienestar animal? ¿Dónde? Porque en ningún momento han hecho presencia ni apoyo para miles de animales.
La gran problemática radica en que no existen sitios oficiales para recibir animales silvestres, y es que el bienestar animal, evidentemente, no está dentro de las prioridades de nadie . Y como resultado de ello, son los zoológicos los que tienen bajo su cuidado a más de 12 mil ejemplares, dejados en custodia por las autoridades la mayoría decomisados del tráfico ilegal. ¡No puedes llamarte defensor de los animales por traer a tu perrito vestido de Superman metido en la axila! ¿Consideran que esto es bienestar animal?
Hagamos conciencia: Los expertos en redes no son especialistas en vida silvestre, los verdaderos defensores de los animales se la han partido toda su vida estudiando y luchando por conservar nuestra fauna, y es en ellos en quienes deben apoyarse los legisladores para crear las leyes de bienestar y protección animal. El bienestar animal nunca podrá ser medido con base en argumentos emocionales, se mide con métodos científicos de especialistas.