LA LIBERACIÓN DE TRES CAPOS PROVOCARÍA UNA GUERRA ENTRE CÁRTELES
Plantean especialistas seguimiento y plan de contención gubernamental Carlos Mendoza, especialista en seguridad, teme `cobro de facturas'
Ciudad de México. Tres narcotraficantes mexicanos están por abandonar la cárcel en México y Estados Unidos tras purgar sus condenas, negociarlas o colaborar como testigos e informantes de las autoridades federales.
Absueltos
Se trata de Vicente Zambada Niebla, el Vicentillo, de 46 años de edad, y Eduardo Arellano Félix, el Doctor, de 64, sentenciados en EUA y Héctor Luis Palma Salazar, el Güero Palma, de 80 años, quien fue absuelto el fin de semana en México de su último juicio y hasta ahora el Gobierno busca si hay acusaciones pendientes.
Solo el primero de ellos se quedará en la Unión Americana bajo resguardo, debido a su condición de testigo colaborador y deberá estar disponible para declarar en los juicios que se llevan a cabo en las cortes federales contra traficantes de droga.
Expertos en temas de seguridad dijeron que la liberación de esos narcos de primera línea podría derivar en revanchas y reactivarse la violencia.
Manelich Castilla, excomisionado de la PF y consultor en temas de seguridad, explicó que la liberación de personajes clave en la operación histórica de organizaciones criminales tan poderosas implica reacomodos y pugnas internas.
“Pueden venir reacomodos, disputa de territorios y de negocios que reclamaran como propios”, dijo.
Sugieren previsión Alertó que podrían recrudecer la violencia entre el Cártel de Jalisco y el Cártel del Pacífico. “Tienen alianzas para disputar territorios y se vuelve más agresivo y violento”, explicó Castilla.
Planteó que el Gobierno debe trabajar en inteligencia
1 TESTIGO protegido es el Vicentillo, quien tendrá que quedarse en EUA.
para dar seguimiento y tener un plan de contención.
Francisco Rivas, director del Observatorio Nacional Ciudadano (ONC), consideró necesario que el Gobierno despliegue a más elementos de las fuerzas federales en las zonas de mayor operación de los cárteles.
“Se exacerban los problemas entre los grupos delictivos y se dan estas venganzas. Empieza a haber atentados... deberían poner atención y desplazar fuerzas federales en las zonas que sabemos de mayor operación y control de estos grupos”, consideró.
“Lo que sí visualizaría en el mediano plazo es un cobro de facturas, sería un conjunto de vendettas para cobrar las facturas que los llevó a prisión, que los mantuvo ahí tanto tiempo”, señaló el especialista en seguridad, Carlos Mendoza.