LA GLORIETA
Respetuoso. Al dictamen favorable de la iniciativa de matrimonio igualitario en Sinaloa, el gobernador Quirino Ordaz Coppel, no le interpondrá un veto. A pregunta expresa, durante la entrega obra de pavimentación hidráulica en Mercado de Abastos ayer, horas antes de que iniciara la respectiva sesión en el Congreso del Estado, el mandatario fue claro, preciso y conciso en su respuesta: por haber, de por medio un mandato judicial para la votación de dicha iniciativa, el cual debe acatar. Insistió en que, por ser una disposición de la corte él será respetuoso, más allá de las posturas de los grupos, a favor y en contra. De hecho, abordado por los medios, pidió que no se le involucrara “en ruidos” pues, como gobernador, insistió, será respetuoso. Llama la atención, sin necesidad de sorprender, lo que comentó al justificar que la anterior votación de dicha unión entre personas del mismo sexo, haya sido en contra: que el estado de Sinaloa “tiene una base muy importante de una sociedad muy conservadora”.
“Irrespetuoso”. En donde no mostró “respeto” el gobernador fue en el decreto que reforma la Ley de Seguridad Pública de Sinaloa, para asignar una pensión del 100 por ciento de la remuneración a las viudas y familiares de policías del estado y municipios, que aprobó el Congreso del Estado el pasado 3 de junio. Bajo el argumento de que viola diversos principios en seguridad social y disposiciones en materia presupuestal, de responsabilidad hacendaria y financiera, Quirino Ordaz Coppel le dio palo a dicho mandato, bajo la insistencia de que debe analizarse, primero, el impacto de las políticas presupuestal, hacendaria y financiera. Esta decisión, obviamente causó inconformidad en las y los involucrados, quienes ya adelantaron que defenderán lo que consideran sus derechos y, para ello, están convocando a una manifestación, para mañana jueves, a las 10:00 horas, en la explanada de Palacio de Gobierno, “para poder recuperar lo otorgado en las luchas de años atrás”.
De terror. Como sacadas de una película de terror, las imágenes de ataúdes por fuera de algunas tumbas en el panteón 21 de marzo, causaron impacto en la sociedad al conocerse el caso. Pero saberse el motivo es igual de impactante: deudos que prefirieron contratar personas sin experiencia en exhumaciones, sacaron los restos de sus difuntos para depositarlos en algún otro cementerio, lo que repercute en la salud pública de quienes realizan estas peligrosas labores sin las medidas adecuadas, así como quienes viven cerca del lugar que, por cierto, se ha convertido en un foco rojo no solo por los riesgos sanitarios, sino porque ahí se han cometido múltiples actos delictivos, como asaltos y asesinatos, además de que es un punto de reunión de drogadictos.
En el caso de las cajas mortuorias recién encontradas, se supo que fueron depositadas, ya vacías, en un punto específico del camposanto en mención y personal del Ayuntamiento, al enterarse, acudió a retirarlas. Al respecto, lo que comenta el coordinador municipal de panteones. Danilo Burgos, es igual de preocupante: las personas que tienen algún difunto en el lugar se tornan agresivas al momento de cobrarles las multas respectivas por los servicios del panteón, por lo que los empleados prefieren evitar confrontaciones.
Rebrote. Es indudable que Sinaloa está viviendo un retroceso en materia de manejo de la pandemia. Ya se ha visto que no bastan los llamados al cuidado y la implementación de las medidas sanitarias y el regreso al color amarillo del semáforo epidemiológico así lo demuestra. Cada vez se conocen más casos de contagio en dependencias públicas, incluso de personas que ya habían sido vacunadas o que por lo menos tenían la primera dosis del antígeno. Por eso, la manifestación de personal de la SEPYC, que piden trabajar de manera escalonada en cuanto a horarios, tiene justificación pues, señalan, hay por lo menos 20 casos confirmados en esta Secretaría, cuyo titular sigue presumiendo la eficiencia de los Centros Comunitarios de Aprendizaje.