Tercer piso
Fuera de control. Con el inicio de la nueva normalidad este lunes, muchas personas salieron a las calles, y cientos de comerciantes comenzaron a abrir sus negocios por la desesperación de volver a vender. Por las calles se ven aglomeraciones, no se guarda la sana distancia y hay muchos que tranquilamente andan sin cubrebocas. ¿Dónde está la autoridad? Tanto el Gobierno del Estado como el Ayuntamiento de Culiacán se han visto rebasados por la población. No hay quien ponga orden, y las acciones se han enfocado en cerrar negocios y clausurar carretas de tacos; mientras ha comenzado a confirmarse un nuevo rebrote a consecuencia del levantamiento de la ley seca. Los comerciantes iniciaron con la rebelión porque consideran injusto que las grandes cadenas comerciales operen al 100 por ciento y se les permita trabajar a expendios de cerveza. Todo parece indicar que la población le ha perdido el miedo al COVID-19, por eso se ve un grave relajamiento de las medidas sanitarias.
La pugna. La lucha por la presidencia de la Comisión Estatal de los Derechos Humanos se recrudeció al entrar el mes de junio, que es cuando se le vence el periodo a José Carlos Álvarez; además de que los diputados regresaron a sus labores. Una fracción de diputados locales morenistas, encabezados por su líder, Graciela Domínguez, pretende entronizarlo otros años por la vía de la imposición, apartándose del procedimiento; pero hay activistas y organizaciones sociales que pugnan que el Congreso del Estado lance la convocatoria para el cambio, como lo estipula la ley. No se sabe si Álvarez se separará o no del cargo para que asuma esa responsabilidad de manera temporal el visitador general, mientras los legisladores definen el camino a seguir para el cambio. Los defensores de los derechos humanos del norte de Sinaloa hacen alianza con los del centro para que los diputados hagan las cosas como debe ser.
Promesas. En Mazatlán, el alcalde Luis Guillermo Benítez Torres no se cansa de anunciar su regreso con bombo y platillo, luego de permanecer casi un mes retirado de la actividad pública para reponerse del COVID-19. La última ocasión anunció que regresará para convertir a Mazatlán en el mejor destino turístico del país, y para ello tiene listo un paquete de 60 obras de un total de 250 que planea entregar este año. A través de una videoconferencia, el polémico Químico felicitó a su equipo de trabajo por el avance que se tiene en varios proyectos de regeneración urbanística, y advierte que viene con la pila recargada.
No ven de otra. El próximo martes, en pleno apogeo de la fase tres del coronavirus, los productores agrícolas realizarán una manifestación con tractores en todo el estado. El motivo, como es sabido por muchos, es con el fin de pedir que el Gobierno federal les responda con el cumplimiento del compromiso que hizo con ellos de pagar la tonelada de maíz en 4 mil 150 pesos. Es mucho lo que se arriesga, sobre todo teniendo en cuenta que la mayoría de quienes participan en estas manifestaciones son personas de edad avanzada, lo que los hace más vulnerables, por lo que tendrán que ser cuidadosos en extremo. Nadie en su sano juicio creería que se quedarán sin hacer nada, sobre todo teniendo en cuenta que su naturaleza es precisamente la de movilizarse siempre que están inconformes.
Sin respuesta. Sentados, porque estar de pie ya cansó a los elementos policiales despedidos en el municipio de Mocorito, quienes desde hace más de seis años fueron destituidos de sus áreas de trabajo, y al no recibir una explicación, establecieron una demanda que fue declarada a su favor, pero el detalle es que hasta la fecha no han sido liquidados. La petición al presidente municipal Guillermo Galindo Castro ha sido constante; sin embargo, la respuesta no llega. En los últimos días han hecho pública en redes sociales esta situación, y hasta han lanzado la petición de ayuda al gobernador Quirino Ordaz Coppel para que agilice esta situación, porque en Mocorito parece ser olvidada.