En Mazatlán, el FC con el beisbol enfrente

LLEGADA. La noticia grande en el deporte mexicano en los últimos días lo ha sido la llegada de lo que era el equipo Monarcas de Morelia a Mazatlán, ciudad en la que históricamente ha sido el beisbol el deporte predominante. Así de entrada, el hasta ahora conocido como “Mazatlán FC” tendrá como reto granjearse en el gusto de un público (el local) básicamente beisbolero.

Sin antecedentes con el balompié, Mazatlán se convierte en otra de las plazas en donde aparentemente se abre una “competencia” entre opciones de entretenimiento. Ya en Culiacán se ha vivido, incluso a nivel Primera División, cuando el equipo Dorados militaba en dicho nivel y tuvo que compartir la plaza con la muy acendrada afición a los Tomateros en beisbol.

La llegada del deporte más popular del mundo, algo que se reconoce, no debe entenderse como un “golpe” al beisbol, como algo que merme o haga palidecer la presencia del beisbol en el puerto. Son ya más de 100 años de tradición, más de un siglo en el que el gusto por la pelota ha persistido y que en nada ha decaído con el paso del tiempo. ¿Por qué lo podría ser la llegada de un equipo profesional de futbol? Muy bueno para la ciudad, que vive del turismo, que se amplíe la oferta de entretenimiento, que tenga más para ofrecer al habitante de la ciudad pero también, a esa gran población flotante luego de que Mazatlán es uno de los principales centros de atracción de México.

Ya lo demás es lo de menos.

IMPACTO. El despido de varios jugadores de Ligas Menores de Estados Unidos y la posibilidad de que la campaña 2020 de Grandes Ligas no se realice, hace concebir esperanzas de que el beisbol mexicano de alguna manera se vea beneficiado.

Peloteros que se quedan “descobijados” al quedarse sin organización que buscarán tener actividad en verano en la LMB y por su parte, nativos y uno que otro extranjero de la Gran Carpa que decidan aterrizar en la LMP cuando llegue el invierno.

Las opciones resultan gratas aun y que nazcan del infortunio. En mucho beneficiaría el nivel de espectáculo el que se puedan lograr firmas interesantes, que adornen los rosters y que al menos generen entre los aficionados la percepción de que se podrá atestiguar algo de “más nivel”.

Claro está, esto viendo las cosas hasta hoy, hasta este presente en el cual se tiene la esperanza que la pandemia lo permita para ese “cuándo” que no parece tan lejano. DINÁMICA. Inmersa en el obligado impasse por la crisis sanitaria, y en espera de que las circunstancias ayuden a iniciar campaña en agosto, la LMB echó a andar su dinámica de celebrar su 95 aniversario convocando a una especie de encuesta para elegir a la novena ideal de todos los tiempos. Interesante y entretenida manera de mantener el contacto con sus aficionados, así sea que se trate de una especie de concurso de popularidad y carente de reglas en materia de presencia regional, como sucede con las votaciones para el Salón de la Fama.

Según las reglas, un comité especializado elige a los candidatos por posición y de ahí los fanáticos eligen a sus favoritos. Bajo ese espectro, no resulta difícil anticipar polémicas o que se vayan a presentar algunas omisiones. La tarea es grande e improbable luego de que la baraja es amplia. Lo que el comité decida proponer es clave luego de que ahí es cuando se empieza a determinar si existe, o no, un “olvido”.

Pero el esfuerzo de mantener “ligada” a la gente se reconoce. En algo se debe entretener a la clientela.