El caso de Kitty Genovese
Existen sucesos que pueden servir de ejemplo para el síndrome del efecto espectador, entre los cuales destaca el asesinato de Kitty Genovese, pues ha sido un hito de la psicología social. En un artículo publicado originalmente por el New York
Times el 27 de marzo de 1964, se relató que en Kew Gardens, Queens, una joven llamada Catherine “Kitty” Genovese fue brutalmente asesinada. Lo que llamó la atención de esta agresión no fue la brutalidad del hecho, sino la apatía de los testigos, pues el autor de la nota escribió que 38 vecinos habían ignorado los gritos desesperados de auxilio de Genovese cuando un hombre de nombre Winston Moseley la apuñalaba hasta la muerte.
Martin Gansberg, el autor del artículo, afirmó que fue la apatía de los testigos lo que hizo que el asesinato destacara. Durante décadas el caso tomó un papel mayor y significativo, hasta el punto de colocarse en varios libros de psicología como un ejemplo para comprender el fenómeno.