Yo no doy mordida
Los jóvenes empresarios capitaneados por Alejandro Carrillo y asesorados por el presidente de Coparmex, Jorge López, presentaron ayer ante los periodistas el programa “Yo no doy mordida”, con el cual fomentan que los empresarios, profesionistas y toda la población firme un pacto para frenar la corrupción que cada año le cuesta al país el 30 por ciento del producto interno bruto. ¿“Qué es la corrupción” ?, es la primera pregunta que se hizo a los asistentes y de inmediato vinieron las definiciones con dedicatoria en especial a los políticos que se apropian de recursos ajenos, pero luego se aclaró entre los jóvenes de 18 y 19 años de edad se dan los mayores índices de actos de corrupción. Vienen luego las ampliaciones a la propuesta inicial, que el compromiso debería ser “yo no doy ni recibo mordida”, y los recuerdos de por qué toda una legislatura federal fue calificada como la “de los moches”, por la descobijada que les dieron a los diputados panistas que pedían un porcentaje del gobierno federal para supuestamente llevar obras a sus distritos, pero estas se contrataban desde la directiva nacional condicionada al consabido “moche”.
El estigma no le cae nada más a los agentes de tránsito o a la burocracia, sino también a todos los comerciantes que venden kilos de 900 gramos, litros de 900 mililitros, al “diezmo” que se ofrece a los constructores y a los proveedores de gobierno a cambio de contratos, aunque se dice que actualizado el porcentaje ya no es del 10 por ciento, sino que araña el 30 por ciento. También a los prestanombres y a los lavadores de dinero. Los jóvenes empresarios ya empezaron a visitar las empresas y universidades en una labor titánica de concientización porque algo se debe hacer para acabar con la corrupción hormiga o gigante, con la participación de todos y no aceptar la frase del expresidente Enrique Peña Nieto cuando intentó lavarse las manos afirmando que “la corrupción es una cuestión cultural de los mexicanos”.
Popurrí. María Luisa Aspe Armella, hermana del exsecretario de Hacienda del sexenio salinista, Pedro Aspe, viene hoy a impartir la conferencia “Nuevo panorama político partidista en México”, en el marco del curso “Liderazgo para la transición” que organiza Coparmex.
ESTOCADA. Ahora sí, de las palabras, México y Estados Unidos pasaron a los manotazos y son los tomateros sinaloenses y los mexicanos los que resultarán mas afectados con el arancel del 17.5 por ciento que acaba de imponer el presidente Donald Trump a las importaciones de tomate mexicano como parte de las medidas que se toman a favor de los productores estadounidenses que acusan a los mexicanos de estar incurriendo en dumping.
Si México emprende medidas de represalia e impone impuestos a las exportaciones agropecuarias provenientes de Estados Unidos se puede desatar una guerra comercial que afectaría a ambos países, pero por lo pronto los agricultores mexicanos enfrentan el riesgo de perder exportaciones por 350 millones de dólares y el colapso del campo.
«Urge reforzar el sistema anticorrupción»
Jorge López Presidente de Coparmex