Siddhartha: La música es para mí una forma de ser
Con la idea de que el tiempo pasado y el venidero son la misma cosa, el mexicano Jorge Siddhartha estrena su trabajo, Memoria-Futuro, con 10 canciones y otros tantos videoclips para conformar una miniserie musical
Con cuatro discos en su haber, Jorge González Ibarra, más conocido como Siddhartha, se ha hecho un hueco en el mundo de la música y es una de las grandes figuras del indie rock.
Natural de Guadalajara, su vida está escrita en las negritas de las notas musicales y los recuerdos que dejó como baterista del grupo de rock mexicano Zoé.
Por sus años profesionales, que comenzaron en 2005, han pasado diversos instrumentos como la batería, la guitarra y también la voz. Sus trabajos como músico global y compositor han dado el jugo de seis creaciones brillantes: Why You? (2008), Náufrago (2011), El vuelo del pez (2014); Únicos
(2016) y Al aire, en vivo, de 2018, además de colaboraciones con otros artistas. EFE le entrevista a raíz de su reciente trabajo, que conjugará video y disco, en aras de una creación muy especial. –¿En qué se ha inspirado para realizar este que será su quinto álbum de estudio? Es el primero en el que me surge el nombre antes que la música. Tenía la frase “memoria futuro” rondándome en la cabeza. La idea de que el tiempo pasado y el que viene, de cierta manera, son una sola cosa y de cómo todo se entrelaza para llegar a tu destino. Básicamente está inspirado en eso, aunque cada canción tiene su propia historia y no hablan específicamente de esto, pero una vez que se unen sí lo hacen.
µ Todo es un motivo para hacer música
–¿Por qué Memoria-Futuro se estrenará en dos partes? Precisamente porque quería enfatizar la idea; cada cara del álbum contendrá cinco temas, y estarán divididas temáticamente, justo como el título lo hace: en Memoria y en Futuro, que se destaparán
en momentos diferentes. Cada una de las canciones vendrá acompañada de un videoclip, o mejor dicho, un capítulo, que irá narrando a lo largo de 10 episodios una historia entrelazada donde estas, finalmente, se unirán en un solo proyecto, haciendo una especie de miniserie musical.
–¿Vamos hacia un nuevo éxito mundial?
Eso quizá no lo decida yo, sino el público que es quien puede ponerte ahí. Para mí, el éxito es tener este álbum, compartirlo y tocarlo. Lo demás no está en mis manos. –¿Tiene prevista realizar alguna gira por América y Europa?
Sí, comenzamos en México, donde estaremos recorriendo un montón de ciudades. En verano vamos a Estados Unidos, después visitaré España y varios países de América Latina. De los que recuerdo están Colombia, Perú, Chile y Argentina. –¿Qué sigue motivando a Siddhartha para seguir creando música?
La música es para mí una forma de ser, una manera de comunicarme, de sanarme. Es mi terapia, mi hobby, mi compañía y mi trabajo. Así que todo es un motivo para hacer música, no sabría sobrevivir sin ella.
–¿Hacia dónde le conduce ese camino?
No tengo idea y creo que eso es lo que más me gusta, ir descubriendo y sorprendiéndome con todo lo que se va construyendo. Me importa más ir disfrutando el camino que a donde llegaré.
µ En los directos ves el resultado de todo
–¿Cómo vive los directos? –Sin duda son una de las partes más emocionantes de mi trabajo, donde ves el resultado de todo. Se viven intensos, de mucha comunicación con el público. Recientemente sacamos un álbum DVD en vivo que se llama Al aire, donde capturamos uno de esos momentos.
Ahí podrán darse una mejor idea.
–Tiene algún público favorito a la hora de actuar. En ese caso, ¿cuál es la razón? No hay públicos favoritos, todos se disfrutan y eso es porque son diferentes, representan placeres o retos que no pueden compararse unos con otros.
–¿Cuál fue el aporte que le concedió haber participado esos años con la banda Zoé? Aprendí mucho en todos sentidos, musicalmente hablando. Sin duda, fue una enorme experiencia. Tanto haber vivido el tour, como haber participado en el proceso de un álbum. Fue la última banda en la que participé y creo que fue también el paso previo que me terminó de preparar para emprender este proyecto en solitario. Y claro, personalmente, también fue una gran experiencia de vida.
–¿Qué recuerdos tiene de ello?
Todos buenos, recuerdo sentir al inicio una mezcla de emoción y miedo, pero miedo del que te dan ganas de vivir. También recuerdo cómo veía la vida y cómo me sirvió haber pasado por ahí para entender algunas cosas. Al mismo tiempo siento como si todo hubiera sido apenas ayer.
–¿Cuáles considera que son las metas que ha conseguido en su caminar musical hasta ahora?
La principal es haber logrado materializar este proyecto. Pasé de nunca haber cantado o tocado otro instrumento (además de la batería) a convertirme en un solista, donde me encargué de prácticamente todo: desde componer, grabar, tocar, producir y mezclar. Luego, traducir eso a un concierto y aprender, sobre la marcha, a apoderarme del nuevo rol. Ha sido un gran reto, lo he disfrutado enormemente. –Para finalizar, ¿dónde se encuentra el límite de Siddhartha?
Supongo que en la muerte.