Aumenta migración de pescadores
En las comunidades pesqueras la actividad ha disminuido por tantas vedas, afirma Teresa Gálvez
Cada día que pasa la situación económica se complica más en las distintas comunidades pesqueras de la región, y la población se está viendo obligada a salir en la búsqueda del sustento diario, afirmó ayer Teresa Gálvez. La comisaria municipal del campo pesquero El Jitzámuri dijo que ciertamente venían enfrentando en meses anteriores una situación difícil en la pesca, pero los problemas terminaron por agudizarse a partir de que el pasado 1 de mayo las autoridades de Conapesca les vedaron las poquitas especies marinas que tenían y les permitían ganar unos pesos para seguir con la manutención de sus familias. Explicó que desde esta fecha, aparte del camarón que les fue vedado desde el 10 de marzo, tampoco pueden capturar jaiba,
mantarraya, tiburón y pez payaso, y lo malo es que esta situación se mantendrá así durante tres meses.
Se eleva emigración en comunidades
Indicó que la realidad es que los pescadores se quedaron sin trabajo porque paralelamente se han venido presentando malas condiciones climáticas que dificultan los trabajos para la captura de las poquitas especies que todavía pueden capturar, y todo esto les genera una situación sumamente difícil.
Indicó que unos pescadores emigraron a otras zonas del país y otros están saliendo de la comunidad hacia el valle para tratar emplearse en las labores agrícolas que hay, pero el problema es que ya también se comenzó a bajar el ritmo de trabajo en la agricultura. Indicó que esto ha provocado que aumente el éxodo de pescadores en la busca de trabajo hacia otras zonas del país. Destacó la urgencia de que las autoridades aceleren la puesta en marcha de los programas sociales que les permitirán amortiguar los efectos de la falta de trabajo que enfrentan en las comunidades pesqueras, como el empleo temporal y el Propesca.
«Estamos enfrentando una situación sumamente complicada en los campos pesqueros»
Teresa Gálvez Comisaria municipal de
El Jitzámuri