Covid-19 y el daño psicológico que genera
El hecho de que un paciente que es tratado por COVID-19 en el Hospital General de Guasave, cuyo estado es grave, haya escapado ayer del nosocomio, aunque en cuestión de minutos lo regresaron a la clínica, es un fiel reflejo de la afectación psicológica que provoca este padecimiento sobre sus portadores.
Para nada debe ser fácil estar completamente aislado por mucho tiempo, sin la relación social a la que por inercia estamos acostumbrados los seres humanos, lo que conlleva a que se tomen decisiones que para la mayoría pueden ser erradas, pues pudo haber contagiado a más gente; pero por otro lado se tiene que entender que ese encierro, aunado al riesgo de perder la vida, son factores que pueden hacer equivocarse a cualquiera.
Esto es un mensaje claro para que en los hospitales que atienden a enfermos de coronavirus no solo se enfoquen en tratar la parte física, sino también la mental, pues así como este paciente se les fugó por unos momentos, lo podrían imitar otros que estén en la misma situación, sobre todo quienes están hospitalizados, pues quienes pasan la cuarentena en casa tal vez no se sientan tan solos.
Es urgente aplicar dispositivos de seguridad más efectivos en los nosocomios con casos de COVID-19, pues no se pueden correr riesgos de este tipo, ya que, al fallar estos, la sociedad queda vulnerable.