LA MATERNIDAD EN PRISIÓN SE HA VISTO VULNERADA
→ La psicóloga, especialista en secuestros y asuntos penitenciarios destacó que desde hace 11 meses, madres e hijos de 0 a 3 años fueron separados
Reinserta A.C. es una de las organizaciones más comprometidas con la población penitenciaria del país. Saskia Niño de Rivera es su presidenta y cofundadora. En 2020, la revista Forbes la nombró una de las 100 mujeres más poderosas de México, y es que su labor ampliamente apegada al cumplimiento de los derechos humanos voltea a ver a uno de los grupos de la población más rechazados, los presos, a quienes les otorga herramientas para mantener una vida alejada del delito, contribuyendo, a su vez, a la seguridad de todo el país.
Ser mujer, tener una hija y la intención de dejar un México mucho más seguro para ella, la motiva a pensar en que es posible hacer cambios reales en favor de la equidad de género, con pandemia o sin ella.
La psicóloga, especialista en secuestros y asuntos penitenciarios por parte del Instituto Nacional de Ciencias Penales, reconoce para EL DEBATE que, en materia de género, los penales de México muestran amplias deficiencias, desde el acceso a la salud, las libertades dentro de los propios penales que son mixtos y, más recientemente, las implicaciones con la maternidad.
Creo que en un sistema tan fallido como el penitenciario, la pandemia les agarró en curva y hay muchas cosas que, por la misma impunidad y corrupción, no pudieron controlar”
Saskia Niño de Rivera
→ Ser mujer y madre en prisión
Reinserta, además de trabajar con adolescentes y jóvenes que están o estuvieron en conflicto con la ley, en particular ha trabajado con mujeres y sus hijos, que, de acuerdo con la autoridad, pueden estar junto con ellas en las cárceles si tienen entre los 0 a 3 años. Sin embargo, Saskia Niño de Rivera compartió que la pandemia por SARS-CoV-2 ha vulnerado esta posibilidad, ya que desde hace 11 meses las madres con hijos de este rango de edad fueron separadas de ellos.
“La incertidumbre de la pandemia que vulneró la situación de la maternidad en prisión, muchas reacciones de las autoridades, muchas tuvieron que ver con convencer a las mujeres, o digamos, invitar a las mujeres de manera un poco forzada a que sacaran a sus bebés de la cárcel, sin que importara el proceso de separación, sin importar la edad del menor o de la menor”, destacó.
Incluso, agregó que muchas mujeres tuvieron que cortar su proceso de lactancia materna para sacar a sus bebés. Destacó que quizá esas medidas se tomaron con poco conocimiento de cómo iba a pegar el covid-19 en las cárceles y cuál iba a ser la reacción con los niños. En este punto compartió que acompañaron a algunas autoridades a implementar el modelo digital de Reinserta y a acompañarlos a tener ideas nuevas, por ejemplo, que las mujeres presas pudieran hacer videollamadas con sus hijos. “Una serie de actividades, que si bien no podían tener la visita presencial de sus hijos, porque una de las reglas que implementaron absolutamente todos los centros penitenciarios es que adultos mayores y niños no podían entrar en la visita, las mujeres en especial llevan 10-11 meses sin ver a sus hijos, hasta ahorita”, apuntó.
Lamentó que hasta ahora no hay un protocolo como tal para regresar a sus niños con sus madres si aún no cumplen los años que la ley mandata.
→ Acceso a la salud
Para Saskia Niño de Rivera, presidenta y cofundadora de Reinserta, otro tema es el que tiene que ver con el acceso a la salud. Consideró que el sistema penitenciario en general tiene un rezago brutal en este punto, y durante la pandemia no ha sido distinto.
Añadió que la mayoría de las mujeres están en penales mixtos, lo cual ha provocado que dentro del mismo están doblemente encarceladas, estén extrasegregadas y no tengan acceso a las áreas comunes, al área médica y demás.
Como pocas organizaciones, Reinserta ha seguido apoyando a la población penitenciaria a pesar de la contingencia sanitaria. Niño de Rivera detalló que implementaron el modelo de reinserción en lo digital, con las jóvenes adolescentes que están privadas de la libertad. No obstante, compartió que ya están trabajando de manera muy dura para implementar el regreso a las cárceles con todas las medidas posibles y seguir reservando con las autoridades para que sigan trabajando en la construcción de penales exclusivos de mujeres, eso ya está estipulado en la ley de ejecución penal y, lamentablemente, las autoridades no están queriendo cumplirlo. “Creo que en un sistema tan fallido como el penitenciario, la pandemia les agarró en curva y hay muchas cosas que, por la misma impunidad y corrupción, no pudieron controlar”, consideró.
Reinserta ha impactado de manera positiva directamente a más de 2 mil 600 personas en el sistema penitenciario, trabajando anualmente con alrededor de 180 adolescentes y jóvenes en conflicto con la ley y en proceso de reinserción, así como 200 mujeres privadas de la libertad y sus hijas e hijos. Incluso, la organización estima que en México existen 700 niños y niñas que nacen y viven en prisión hasta los tres años.