Investigación y desarrollo: apuesta irrenunciable en favor de México
En los últimos 12 meses nos hemos dado cuenta de numerosas iniciativas que buscan acelerar la reactivación de distintos sectores económicos que han sido afectados por los estragos del covid-19. Si bien, la humanidad ha sabido enfrentar de una u otra forma el reto, es importante destacar que, gracias al trabajo de la comunidad de investigadores y académicos, y en gran medida del de todo el personal que está en la primera línea de batalla, la situación se está logrando controlar, y hoy contamos con distintos antígenos que nos permitirán ponerle freno a esta enfermedad. De acuerdo con el informe anual titulado "El estado de la ciencia: principales indicadores de ciencia y tecnología iberoamericanos/interamericanos" de la Red de Indicadores de Ciencia y Tecnología (RICYT), de enero a junio del año pasado, Iberoamérica acumuló 31,322 publicaciones sobre el covid-19.
Aunque estos datos son alentadores, es importante impulsar e involucrar a las nuevas generaciones para que se sientan atraídas por el estudio de las ciencias y que esto se traduzca en generación de conocimiento para el bien social. También debe fortalecerse la inversión en programas que permitan el florecimiento del conocimiento científico, pues actualmente, según datos de la OCDE, nuestro país invierte el equivalente del 0.43% de su Producto Interno Bruto en investigación y desarrollo.
Para el Tecnológico de Monterrey, este rubro ha sido de suma importancia, pues desde hace más de 70 años se ha impulsado de manera proactiva la investigación científica, que ha conseguido importantes aportaciones. A la fecha hay registro de 44 Grupos de Investigación con Enfoque Estratégico (GIIE); hay 1,484 profesoras y profesores investigadores, de los cuales 865 pertenecen a estos Grupos y 672 están adscritos al Sistema Nacional de Investigadores (SNI). Además, hay 15,375 estudiantes haciendo investigación, de los cuales, 13,915 son de profesional, 508 en doctorado, 524 en maestría científica y 428 en maestría profesionalizante. Asimismo, existen 370 patentes solicitadas ante el IMPI y se registra un total de 150 patentes otorgadas por este mismo organismo. Se cuenta con un total de 6,510 publicaciones científicas indizadas en Scopus, la mayor base de datos bibliográficos científicos en el mundo.
Hace unas semanas, el Tecnológico de Monterrey realizó el 51 Congreso de Investigación y Desarrollo (CID), que congregó a más de 5 mil participantes interesados en temas relacionados con ciencia y tecnología. En este encuentro, que este año tuvo un formato 100% digital, se escucharon voces propositivas como la de Aaron Ciechanover, Premio Nobel de Química 2004, quien compartió los grandes retos a los que se enfrenta el ser humano en esta coyuntura, pues según explicó, la bioética ha sido uno de los principales conceptos que han regido las decisiones de los grandes gobiernos en este último año.
Además, la Institución aprovechó el espacio para presentar dos laboratorios que posicionarán al país como un referente en temas relacionados con secuenciación genómica y monitoreo de aguas residuales para la detección de enfermedades epidemiológicas, entre ellas, SARS-Cov-2.
Estos laboratorios, que ya se encuentran trabajando con distintas organizaciones públicas y privadas, hacen un llamado a seguir impulsando de manera decisiva el ecosistema científico de América Latina, pues son el testimonio fiel de la importancia, para un país, de contar con gente capacitada para seguir empujando la búsqueda de oportunidades y soluciones innovadoras a los retos que enfrenta el planeta.