Tiempo de reconciliación: el primer encuentro Ordaz-Rocha
El gobernador Quirino Ordaz Coppel y su virtual sucesor, Rubén Rocha Moya, se encontraron por primera vez, desde la elección. Ocurrió ayer a las 11:00 horas en la alma mater de Rocha, la UAS, justo en el Auditorio de la Autonomía Universitaria, inaugurada por Ordaz 12 días atrás. El marco: la toma de posesión del nuevo rector de nuestra máxima casa de estudios, el doctor Jesús Madueña Molina. El saludo: de lejos, con la mano en alto y una sonrisa por parte de ambos, en respeto al protocolo marcado por las autoridades universitarias. El gesto mutuo de amistad y respeto se dio mientras Quirino era conducido por un pasillo hacia el presídium, acompañado por el rector entrante y el saliente, doctor Juan Eulogio Guerra Liera, mientras Rocha ocupaba una butaca en medio de la sexta fila, asignada a los exrectores. A su lado, Héctor Melesio Cuen Ojeda y enseguida Víctor Antonio Corrales Burgueño, Gómer Monárrez González y Jorge Luis Guevara Reynaga.
En la fila de adelante, estaba la señora Rosy Fuentes de Ordaz, junto a la licenciada Patricia Corrales de Guerra, esposa del hoy exrector, con quien compartió numerosas gestiones como parte de la relación UASDIF para ayuda social. La primera dama intercambió saludos cordiales con el doctor Rocha, el maestro Cuen y el resto de exrectores.
Por lo demás, el propio Rubén Rocha informó a los reporteros al término del acto que ya recibió las llamadas de felicitación del gobernador, de Rosa Elena Millán y de Sergio Torres, a la vez que ha estado en comunicación con el senador Mario Zamora (regresa a su escaño el próximo martes) vía WhatsApp. La llamada de Ordaz Coppel a Rocha Moya para expresarle sus parabienes se dio el lunes a las 9:00 horas, de acuerdo con información de primera mano. Hubo esta semana una segunda comunicación telefónica entre ambos y es posible que este día agenden su primera reunión formal, que tal vez ocurra a inicios de la semana próxima, a efecto de iniciar el proceso de transición gubernamental. Ayer al mediodía, el triunfador de la elección viajó a la Ciudad de México, con planes de regresar a Culiacán en el transcurso de este día. Acudió al festejo de ganadores morenistas con el líder nacional de su partido en el hemiciclo a Juárez.
La buena relación entre Quirino Ordaz y Rubén Rocha se ha mantenido ininterrumpida desde que se conocieron en 2005. Incluso en los años que Rocha vivió en CDMX y Quirino en Mazatlán (2010-2016) estuvieron siempre en comunicación. De allí el generalizado pronóstico de una transición tersa. La civilidad, cabe reconocer, ha marcado los días posteriores a la votación del domingo por parte de los diversos actores políticos, salvo excepciones que confirman la regla.
A diferencia de otros estados, donde reinan los berrinches de los perdedores y gestos revanchistas de los ganadores, en Sinaloa asoman tiempos de concordia. El llamado ayer por parte de quien seguramente será el gobernador de Sinaloa a partir del 1 de noviembre fue claro, una vez concluido el proceso electoral: “Es tiempo de convocar a la unidad y a la reconciliación, para transitar en sana paz con todos los sectores”. El liderazgo de Rocha ha permeado en las filas morenistas y pasistas, que en espacios como las redes sociales celebran su triunfo sin necesidad de mensajes hirientes a los derrotados. Es en los ganadores en quienes debe caber una actitud de generosidad.
Factor clave ha sido el hecho de que, en el caso de Sinaloa, hubo un respeto absoluto al proceso por parte tanto del presidente Andrés Manuel López Obrador como del gobernador Quirino Ordaz Coppel. Honor a quien honor merece.