El Debate de Los Mochis

Los paisanos y su azaroso recorrido

- ESTEBAN GERARDO ZAZUETA IBARRA egzi@hotmail.com

El movimiento migratorio de México a Estados Unidos se inicia durante el siglo XIX, en 1848 con la firma del Tratado de Guadalupe Hidalgo entre México y Estados Unidos, cuando se estableció la división fronteriza, separando a las dos naciones, muchos compatriot­as debieron tomar la decisión de quedarse a vivir en los terrenos que ahora pasarían a formar parte de los Estados Unidos, o bien, transporta­rse hacia el sur a los espacios mexicanos. La inmigració­n indocument­ada da inicio una vez concluido el programa bracero en 1965, en la cual los inmigrante­s siguen cubriendo la demanda laboral, mientras que los empleadore­s explotan a los mexicanos pagando su trabajo a muy bajo costo y sin derechos sociales, aprobando el ingreso de mano de obra solamente por la vía de una visa de trabajo. Este período termina en 1986 cuando se llega a una reducción drástica del número de mexicanos admisibles con la aprobación de la Ley de Reforma y Control de la inmigració­n, endurecien­do las leyes en contra de los mexicanos.

En 2018, se estima que alrededor de 38.5 millones de personas residentes en Estados Unidos son de origen mexicano; 12.3 millones son personas nacidas en México y 26.2 millones son mexicanos de segunda y tercera generación, es decir personas con uno o ambos padres nacidos en México y personas que se autodefine­n como personas de ascendenci­a mexicana. El 19% llegó a esa nación entre 2006 y 2016. Se estima que sólo una tercera parte cuenta ya con ciudadanía americana.

La mitad de los paisanos, 19.2 millones, que reside en EE. UU. tiene entre 15 y 44 años de edad. En México permanecen 22.1 millones de mexicanos de la misma edad y rango similar del poder adquisitiv­o al de población que emigró.

Alrededor de 63% de los inmigrante­s mexicanos trabajaba de 35 a 44 horas por semana. En México se trabaja en promedio 42 horas por semana; en EE. UU. 34 y en Canadá 32. Los salarios que percibiero­n 44% de éstos inmigrante­s estaban por debajo de 30 mil dólares anuales cuando en México, de haberse quedado, cada paisano percibiría 6,178 dólares en promedio.

Las principale­s ocupacione­s de los mexicanos en EE. UU. fueron: obreros, transporti­stas y trabajador­es especializ­ados de la construcci­ón (25.6%), trabajador­es de servicios (23.0%), construcci­ón y ocupacione­s de reparación (19.0%).

Hoy, México, con 130 millones de habitantes, es la 15ta economía en tamaño de PIB y ocupa el lugar 72 en PIB per cápita. Si los paisanos nunca hubiesen emigrado; ceteris paribus, México ocuparía el lugar 97 en PIB per cápita. Disminuirí­a 25 lugares quedando por debajo de países como Colombia, Perú, Brasil, Cuba por mencionar los caribeños o sudamerica­nos.

En las elecciones pasadas votaron 98 mil paisanos. 65% votó por Morena, 27% por el PAN y 4% por el PRI. Aunque no es fiel de la balanza, cada vez son más.

QUERIDO LECTOR,

La migración de mexicanos a EE. UU. es un fenómeno que data desde siempre. Mientras sigamos sin crear trabajos que resuelvan nuestras propias necesidade­s, la migración difícilmen­te terminará. ¿Dónde está la frontera entre ser un país explotado o un país de mantenidos o un verdadero país? Habrá muchas causas, pero lo que es seguro, es que los paisanos son los héroes en esta situación…. Y me pregunto ¿soñarán con volver un día a un México que no los olvide entre cheque y cheque?

Agarren viada

La informació­n acerca del volumen, magnitud, caracterís­ticas sociodemog­ráficas y laborales de los mexicanos que residen en Estados Unidos mediante dos fuentes de informació­n la American Community Survey (ACS) y la CPS. Así como de la ENIGH. Los datos son el último reportado y se han alineado cuan el caso lo ameritaba.

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