Todos tienen derecho a vivir y ser felices
Los beneficios de la Cuarta Transformación comienzan a cristalizarse en los ámbitos legislativos y de las políticas públicas. La nueva forma de gobernar abandonó la rancia retórica para privilegiar las acciones.
Los grupos históricamente discriminados y en desventaja son para el nuevo gobierno una prioridad. Sin etiquetas, sin distinción de edad, sexo, orientación sexual, ideología, creencias o capacidades, la tarea fundamental es eliminar las desigualdades existentes para que cada mexicano sea integrado a los beneficios del desarrollo y pueda ejercer sin obstáculos todos y cada uno de sus derechos.
Prueba de ello, son las reformas votadas la semana pasada en ambas Cámaras, y que hoy son norma vigente, las cuales reconocen y posibilitan a las parejas del mismo sexo el ejercicio de su derecho a la seguridad social. En otras palabras, sin fobias, prejuicios ni dobles discursos, las leyes del Seguro Social y del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado, establecen un mandato expreso en favor de las parejas del mismo sexo, arrancando