Tercer piso
Rupturas. En los pasillos del Congreso del Estado cada día es más frecuente escuchar sobre las diferencias fuertes que hay al interior del grupo parlamentario de Morena, y en los últimos días, los diputados locales morenistas han dado muestras de división y han comenzado a «grillar» a su coordinadora, Graciela Domínguez Nava, que en las últimas sesiones se ha negado a atender a los reporteros porque — según nos comentan— quiere mantenerse alejada de los medios de comunicación para no informar sobre el trabajo que hacen al interior de la bancada y para bajarle a su protagonismo. Otra prueba que deja en evidencia la división del grupo parlamentario fue la presentación de la iniciativa de Ley de Remuneraciones de Servidores Públicos del Estado de Sinaloa, que fue firmada únicamente por once legisladores de Morena de un total de 23; y Domínguez Nava fue de las que no firmó. En poco más de dos meses, las diferencias son grandes, y todo porque se han conformado grupos al interior que luchan por controlar el partido y la labor legislativa, y todo por falta de liderazgo partidista.
Quieren atención. En Mazatlán, las familias desplazadas por la violencia en las zonas rurales de Concordia, Mazatlán y Rosario empezaron a intensificar sus medidas de protestas después de años de recibir solo despensas, cobijas, colchonetas y promesas para la construcción de viviendas que nunca se cristalizan. Ayer, encabezados por líderes del Movimiento Amplio Social Sinaloense (MASS) realizaron una manifestación en plena zona hotelera. Antes de que protestaran frente a los hoteles del gobernador Quirino Ordaz Coppel fueron atendidos por funcionarios de la Sedesol estatal, quienes, de nuevo, reiteraron el propósito de integrar un programa de apoyo para la vivienda. Aun así, los inconformes se retiraron con la advertencia de que debe darse celeridad a la atención de sus problemas.
Algo es algo. El titular de la Sepyc en Sinaloa, Juan Alfonso
Mejía López, llegó ayer a Ahome como Santa Claus. En nombre del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) trajo 5 mil paquetes de útiles escolares, 47 paquetes de material didáctico para preescolar y 67 cajas con material para primarias que perdieron material escolar como consecuencia de las inundaciones de la tormenta 19-E de septiembre. La entrega fue en el jardín de niños María del Rosario Elenes Martínez, de la colonia Adolfo López Mateos. Ahora solo falta que llegue a todas las escuelas que tuvieron la misma pérdida, sobre todo que se arreglen las deficiencias en los planteles educativos, de las que mejor ni hablan.
Atolondrado. Ayer que acudió al municipio de Sinaloa para entregar becas de transporte a estudiantes, el gobernador terminó «atolondrado», así lo dijo, por la presidenta municipal María Beatriz León Rubio. ¿Y cómo no? Dice que tan solo en cinco minutos que estuvo con él en el traslado al lugar del evento la edil le pidió un millón de pesos para continuar la restauración de la iglesia y luego el drenaje, para lo cual le solicitó seis millones más, para rematar con la construcción de la carretera Llano Grande-El Palotal. A decir verdad, o andaba muy de buenas el mandatario, que a todo le dijo que sí, o con este hecho se termina de confirmar lo que se dice de que María León es de las consentidas de Quirino Ordaz, pues, aunque en la entrevista se refirió al caso de la alcaldesa de Guasave como una mujer entrona y muy echada para adelante, después de su inicio como alcaldesa, hace más de un mes, no se ha visto su intervención directa en Guasave, y miren que, broncas, tienen hasta para tirar hacia arriba.
En reelección. En Mocorito, en solo una de siete sindicaturas se llevará a cabo el proceso de elección porque se optó por la reelección de cinco síndicos, quienes ya habían sido electos para la administración anterior, por lo cual en la sindicatura de la Melchor Ocampo continúa Esteban Sánchez León; en Rosamorada, María Cristina Inzunza; en Cerro Agudo, Andrés Cuevas Favela; y en El Valle de Leyva Solano, Adrián Sánchez López, precisamente todos afines al partido del alcalde Guillermo Galindo; mientras que en San Benito solo se tuvo un registro, y en Pericos pareciera que el interés por cubrir esta figura es de mucho porque se tienen a tres de cuatro candidatos que se habían registrado, aunque uno de los aspirantes desistió. La férrea pelea en Pericos va en ascenso, pues no solo está en juego la sindicatura, sino la posición política para el próximo proceso electoral.