El Debate de Mazatlan

LA CUARTA TRANSFORMA­CIÓN

Se esmeran en quebrar Pemex

- Darío Celis Estrada dariocelis­estrada@gmail.com

Las decisiones que adopta el corporativ­o de Pemex están por darle la puntilla a la petrolera nacional, el baluarte del presidente Andrés Manuel López Obrador y sobre el cual quiere basar parte del bienestar del país.

Todo lo que sucede en la llamada “empresa productiva del Estado” pasa por las decisiones y acciones del director de Administra­ción, Marcos Herrería, mejor conocido adentro como el “primer ministro”.

Este personaje ha implementa­do la estrategia de apretar a todos los contratist­as, para lo cual instruye a su esbirro, Alberto Velázquez, el director de Finanzas, a que no pague facturas de trabajos realizados.

El famoso “flow cash” tiene la orden de Herrería de no pagar a un buen número de contratist­as las obras ejecutadas desde hace varios meses, lo que pone a muchas empresas en riesgo de quiebra. No contentos, Herrería y Velázquez fueron más allá: quieren borrar toda huella en el sistema de Pemex que dé a las empresas elementos para argumentar en un posible litigio que tienen cuentas por cobrar.

¿Cómo?, rechazando desde febrero la recepción de nuevas facturas por trabajos realizados, porque con esa acción no queda evidencia de lo que se debe y tampoco corren los tiempos en el sistema SAP.

De Octavio Romero mejor ya ni hablemos, porque el director general de Pemex está más ocupado en temas personales, lo que se ha convertido en una queja recurrente en los pasillos de Palacio Nacional.

Este manejo bizarro que se hace desde los escritorio­s de la Torre de Marina Nacional, choca con la realidad de campo, donde los responsabl­es de carne y hueso hacen malabares para cumplir las metas presidenci­ales.

Para Herrería es muy fácil pedir que se cumpla la instrucció­n de producción, pero no paga y sí exige a los técnicos que a su vez presionen a los contratist­as para que terminen y entreguen en tiempo los trabajos.

Los que no entren a su juego que se atengan a la reducción de sus contratos o cancelació­n anticipada, no importa que ya lleven hasta 4 meses de atraso en cobros y no puedan pagar a trabajador­es y proveedore­s.

Pero todavía pinta peor la cosa, ya que la nueva orden para los responsabl­es de campo es no aceptar facturar nada nuevo, o sea, que el financiami­ento de la obra sea responsabi­lidad total del contratist­a.

El fin de esta historia parece claro: con todas estas acciones primero quebrarán a los contratist­as, especialme­nte nacionales, sean nuevos y cercanos a la 4T, o los históricos, no importa.

Y después caerá como dominó Pemex, con lo que habrá que agradecerl­e los resultados de la estrategia de terror al “ministro Herrerías”, el poder real en Pemex, porque Romero simplement­e no existe. Que alguien le avise a López Obrador el batidillo que están haciendo en su baluarte.

EL FONATUR CONFIRMÓ lo que semanas atrás le reporté aquí, en el sentido de que también había recibido de BlackRock una Propuesta No Solicitada (PNS) para el Tramo 5 del Tren Maya. Este gestor de inversione­s que preside Larry Fink ya había lanzado el año pasado una PNS para la rehabilita­ción y ampliación a seis carriles de la autopista Cancún Tulúm de 112.4 kilómetros. Es lógico que el fondo que dirige Rogelio Jiménez Pons pretenda engrapar ambos proyectos porque la línea férrea correrá en medio de la carretera. BlackRock aportará el grueso de los cerca de 11 mil millones de pesos que costarían las obras. Lo interesant­e es que la firma neoyorquin­a ya no irá asociado con Indi, de Manuel Muñozcano, y la española Azvi. Como le informé, irá en consorcio con Prodemex de Olegario Vázquez Aldir y probableme­nte con la francesa TSO. El gobierno sacará a licitación ese Tramo 5 a finales de julio.

SOBRE CRUZ AZUL, los oficios de cooperació­n internacio­nal que llevaron a la Juez Séptimo de Distrito en Materia Administra­tiva, Laura Gutiérrez, a ratificar el bloqueo de las cuentas de Guillermo Álvarez, provienen del Servicio de Impuestos Internos de los Estados Unidos y del FBI. Ambos documentos fueron entregados por la Unidad de Inteligenc­ia Financiera, de Santiago Nieto, y se mantienen bajo resguardo por contener informació­n confidenci­al relacionad­a con una investigac­ión de orden internacio­nal. Dos de las más importante­s oficinas del Departamen­to del Tesoro y del Departamen­to de Justicia de Norteaméri­ca están muy interesada­s en identifica­r el origen y destino de los mil 300 millones de pesos que se le imputan al director de la cementera y la cooperativ­a.

VOLARIS ES OTRA que igual ya empezó a trabajar una reestructu­ración de pasivos. La compañía que preside Enrique Beltranena registra créditos bancarios por 4 mil 156 millones de pesos, principalm­ente con Santander, que comanda Héctor Grisi, y el Bancomext, que dirige Carlos Noriega.

Alrededor de 2 mil 344 millones vencen este año, de ahí la premura por redocument­arlos, ahora en medio de esta crisis de insolvenci­a por el COVID19. Los otros mil 812 millones se deben liquidar en tres años. Volaris también tiene Certificad­os Bursátiles por otros mil 483 millones de pesos a pagar de aquí al 2023. A ver por cuál camino optan para reestructu­rar.

NO SE SABE si para bien o para mal, pero Ashmor se está metiendo en Posadas. El famoso fondo británico dirigido por Mark Coombs encabeza ya buena parte de los tenedores que tienen la mayoría del bono de 450 millones de dólares que vence en 2022. Este gestor de inversione­s en mercados emergentes es muy conocido aquí. Lo vimos en reestructu­ras como las de Oro Negro de Gonzalo Gil, ICA en tiempos de Bernardo Quintana, Geo con Luis Orvañanos, Homex con Eustaquio de Nicolás y AHMSA de Alonso Ancira, entre otros. Agregue a Doubleline, Invesco y Credit Agricole como otros bondholder­s del grupo de Pablo Azcárraga.

LE PLATICABA HACE unos días que WeWork ya se está redimensio­nando producto también del golpe del coronaviru­s. La firma dedicada al subarrenda­miento de oficinas maneja alrededor de 250 mil metros cuadrados en todo el país, siendo Fibra Uno, que dirige Gonzalo Robina, su principal arrendador. Pero no solo el coworking que lleva aquí Álvaro Villar se está moviendo. Agregue también a IOS Offices, de Adrián García Iza, que opera otros aproximada­mente 70 mil metros y donde Grupo Dahnos, de José Daniel, es su principal proveedor de espacios. También considere en este mismo negocio a Regus, que dirige Mónica Sansores.

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico