NIÑOS DE 14 AÑOS SON PERFECTAS PRESAS DEL CRIMEN ORGANIZADO
El libro `Un sicario en cada hijo te dio' narra las terribles historias de niños y adolescentes criminales en México
«Es un niño que puede jalar un gatillo igual que un niño de 18 años, que tiene igual acceso a portación de armas y que para la red de delincuencia organizada es mucho más económico; uno, porque no va a tener una consecuencia jurídica, no lo pueden internar, y, dos, es lo más económico»
Mercedes Llamas Una de las autoras del libro Un sicario en cada hijo te dio
Las historias de seis jóvenes narradas en el libro Un sicario en cada hijo te dio parecen superar la vida de cualquier delincuente de más de 30 años recluido en las cárceles de México. Relatos que van desde una adolescente contratada para «levantar» a otros; una que tenía su propia red de prostitución a los 16 años; un niño que a los 8 años empezó a matar y robar niños para una red de venta de órganos; hasta Daniel, un joven que creció sabiendo que tenía que vengar la muerte de su papá, y terminó a los 12 años formando parte del Cártel de Jalisco Nueva Generación. Saskia Niño de Rivera, Mercedes Castañeda, Fernanda Dorantes y Mercedes Llamas son las autoras, quienes además hacen un análisis de los impactos psicológicos y la falta de justicia.
Llamado a la sociedad
Mercedes Llamas, doctora en Gobierno y Administración Pública por la Universidad Complutense de Madrid, comentó en entrevista para EL DEBATE que el libro surgió trabajando en el sistema de internamiento para adolescentes, lo que antes era correccional y tutelar de menores. Son seis casos —indicó— que representan a los 35 mil o casi 45 mil niños que hoy se encuentran captados por la delincuencia organizada. «No es que sean los más fuertes, simplemente son representativos», comentó.
La especialista dijo que Un sicario en cada hijo te dio es un llamado muy fuerte a la sociedad y al Gobierno sobre lo que está sucediendo en nuestro país, pues deben ser elaboradas políticas públicas integrales que pongan un freno tanto a los delitos como a la vulnerabilidad de los menores: «Hacemos un llamado a la sociedad, porque este un problema de todos los mexicanos; primero, porque son el futuro de México, y segundo porque son personas que van a regresar a la sociedad», expuso.
Niños ideales
Comentó que en la realización de este libro —que duró más de cuatro meses— encontraron dos procesos en materia jurídica muy importantes. Abundó que en el Sistema Integral de Justicia para Adolescentes se tiene una ley que es garante de derechos humanos en cuanto a adolescentes y niños. Fue reformada, incluso la ley no permite que los menos de 14 años sean ingresados a ningún centro de internamiento; es decir, independientemente de lo que el niño haya cometido, bajo ninguna circunstancia puede ser encerrado este niño o adolescente. Eso, visto desde los derechos humanos, es muy correcto, consideró Mercedes Llamas; sin embargo, dijo que los sistemas que tienen esas leyes tan grandes de derechos humanos cumplen con otras medidas que en México no se cumplen: «Un niño que con una conducta agresiva a los 13 años, en otro país que tienen el mismo tipo de ley, por ejemplo, se le hace un seguimiento exhaustivo a este niño, a la familia, se ve que vaya a la escuela; es decir, el Gobierno camina de la mano con el niño para que no vuelva a reincidir. Pero qué sucede en México. En la ley también evidentemente tenemos estas medidas que se llaman medidas externamiento, que son medidas que se deberían de cumplir para evitar que el niño vuelva a cometer esta conducta, pero no sucede así en México», lamentó la también maestra en Criminología y Política criminal. Contrariamente —expuso—, cuando un niño de 14 años comente un delito, básicamente, en la mayoría de los estados, es regresado a la calle, a su familia, y punto. Entonces — consideró—, los menores de esta edad se vuelven perfectas presas para la delincuencia organizada: «Es un niño que puede jalar un gatillo igual que un niño de 18 años, que tiene igual acceso a portación de armas y que para la red de delincuencia organizada es mucho más económico; uno, porque no va a tener una consecuencia jurídica, no lo pueden internar; y, dos, es lo más económico. Le puede pagar menos a un niño de 13 años, de 10 años; son niños muy baratos, niños desechables, niños que si les pasa algo muchas veces la familia ni siquiera va a hablar por ellos o a intentar rescatarlos porque vienen de familias pocos estructuradas», lamentó.
Saskia Niño de Rivera, Mercedes Castañeda, Fernanda Dorantes y Mercedes Llamas son las autoras de Un sicario en cada hijo te dio, e hicieron además un recuento de los delitos de los seis niños. La mayoría —expuso Llamas— tiene delitos de secuestro, múltiples homicidios, portación de armas, prostitución, narcotráfico, destazamiento de cuerpos, venta de órganos, entre otros, y únicamente están siendo procesados por un secuestro, la mayoría de ellos. «De hecho, de nuestros seis casos, cinco están únicamente procesados por un secuestro, entonces nos damos cuenta de la impunidad total», aseguró.
Traumas complejos
Por otro lado, Mercedes Llamas, que también es experta en infracción e inadaptación social, indicó que en esos niños, desde que nacieron, sus derechos humanos fueron violentados. Por ejemplo, destacó el caso de Damián, que aparece en el libro, un niño que fue regalado o vendido a los 7 años por su madre a una casa que se dedicaba a la mendicidad, a explotarlos, y entonces de ahí en adelante él vive cosas traumáticas, vive en la basura, después de mucho tiempo empieza a vender drogas, después se incorpora a un cártel. Ese niño —expuso— no tenía acta de nacimiento ni nombre ni personalidad jurídica, y, evidentemente, le fue violado su derecho a la salud, a la educación, a una familia, por lo tanto consideró que se revela que son niños que, desde que nacen, todos los derechos humanos que tendrían que estar garantizados bajo normatividad institucional, no los tienen, y al violarse todos estos derechos, evidentemente el niño encuentra en el crimen organizado lo que no encontró en su familia, en la sociedad o en el Gobierno.
Respecto al ámbito psicológico, encontraron además un trauma complejo, que es parecido al estrés postraumático, pero este aplicado en adolescentes, así como afectaciones en el cerebro estructuralmente, afectaciones a las emociones, problemas de apego, deficiencias en el desarrollo del lenguaje, conceptos autodestructivos, entre otros: «Son niños que por más que hayan sido tratados durante año y medio por concejo interdisciplinario, por psiquiatras, por médicos y demás, tienen las consecuencias de este trauma complejo, entonces es muy complicado», explicó.
Mercedes Llamas puntualizo que el trauma es causado en muchos de ellos por sus familias desde que nacen, que son familias con mucha exclusión social, familias que no están correctamente integradas, donde hay violencia psicológica, violencia sexual, violencia física, entre otras.
Un sicario en cada hijo te dio ya está a la venta en las librerías del país de forma tangible y electrónica.