MARCELO COSTERO GARBARINO
Presidente de Grupo Acuícola de Conafab
En México hay cuatro industrias de la acuicultura, y la más importante es la del camarón, con una producción anual de 180 mil toneladas, que equivaldría a un valor en venta de mil millones de dólares.
Desde hace más de 12 años, México produce más camarón por acuicultura que por pesca.
Y aunque el mercado local es importante, quedándose alrededor del 70 por ciento de la producción, se exportan entre 40 y 45 mil toneladas al año.
Los productores del norte de Sinaloa y los de Sonora exportan a Europa desde hace tiempo, y a China desde hace cuatro o cinco años, que se ha convertido en un mercado muy importante. Aunque Estados Unidos sigue siendo el mercado natural para el camarón mexicano.
En ese contexto, Marcelo Costero Garbarino, presidente de Grupo Acuícola del Consejo Nacional de Fabricantes de Alimento Balanceado, considera que se tiene potencial para triplicar la producción en dólares.
Sinaloa representa el 40 por ciento de la producción nacional, ¿hay oportunidad de potencializar esa producción?
Muchísima. Sinaloa es el estado más importante en producción, debe de estar en alrededor de las 80 mil toneladas al año.
Los sistemas de producción en Sinaloa se centran más que nada en la costa, donde la infraestructura es todavía muy pobre, entonces, las granjas adolecen, por ejemplo, de luz eléctrica, y eso limita mucho el tipo de cultivo que puedan realizar. Si tuviéramos una infraestructura un poco más desarrollada, con luz eléctrica se podría poner sistemas de aislación, por ejemplo, y se podría triplicar o cuadruplicar la producción en una mejor unidad de superficie. Entonces, el potencial es muy grande.
En Sinaloa y Sonora tenemos estas planicies en zonas muy grandes de terrenos salitrosos, arcillosos, que no tienen una vocación agrícola verdadera, que están pegadas a la costa, y los esteros no tienen una vocación ganadera, entonces son ideales para la acuicultura. Pero sí tenemos sistemas de producción, digamos, semiintensivos, no intensivos todavía.
Además de Sinaloa y Sonora, ¿qué otros estados tienen la capacidad para potencializar la producción acuícola?
Sonora y Sinaloa producen alrededor de 160 mil de las 180 mil toneladas. Sin embargo, Nayarit se está metiendo como un estado que si bien tiene muchos años de intentar cultivar camarón, han llegado empresarios de Sonora y de Sinaloa a invertir con más tecnología y están empezando a producir.
Nayarit va a producir alrededor de las 15 mil toneladas este año. Ya empieza a ser un estado importante. Sobre todo, repito, porque las empresas que están llegando son de capital sinaloense o sonorense.
Otro estado muy importante, que está creciendo y ya produce alrededor de siete mil u ocho mil toneladas, es Colima.
Nayarit y Colima tienen la gran ventaja de que tienen el clima cálido todo el año, entonces, no tienen que parar en invierno, como el norte de Sinaloa y Sonora, donde la temporada de engorda es reducida, es de nueve meses, ocho meses. Sin embargo, no tienen las planicies costeras que tenemos en Sonora y Sinaloa. Sus costas son más rocosas, la construcción de las granjas es más difícil, pero están dando granjas intensivas con mucho éxito.
¿Cuáles serían los retos más importantes a corto plazo?
En el corto plazo, es tener una larva de calidad, libre de todas las enfermedades, porque todavía tenemos problemas importantes de enfermedades, que hacen que el cultivo no sea tan redituable.
Estamos trabajando con sobrevivencias de alrededor del 60 por ciento, cuando en otros países están entre el 80 y el 90 por ciento. Entonces, necesitamos mejorar la calidad sanitaria de la larva.
A mediano y largo plazo, el reto es mejorar la infraestructura de servicios que llegan a las granjas, caminos y electricidad es lo más importante, y eso sí haría que la industria se dispare tres o cuatro veces más. Otro reto es la disponibilidad de créditos de la banca. La banca no participa en nuestra actividad, y eso limita mucho el crecimiento de los productores.
Con las condiciones que ya se tienen, ¿qué tanto podría crecer este sector?
Yo creo que el crecimiento puede ser tres veces más, sin ningún problema. Tenemos condiciones naturales únicas: tenemos el Mar de Cortés, donde son localidades con oleaje muy bajo y es relativamente fácil y barato emplear agua de mar para las granjas. Entonces, el potencial es muy grande.
Como ejemplo está Ecuador, que es un país que tiene un litoral más pequeño que el estado de Sinaloa, y produce seis veces más que todo México al año.
¿La meta sería esa: aspirar a convertirse en un país como Ecuador?
Sí, la meta debería ser esa. Creo que podemos llegar a 500 mil toneladas (anuales) en un periodo de cinco años.
No es fácil, son inversiones complicadas, pero están todas las condiciones puestas para poder lograrlo.*