Conversaciones de Whatsapp hunden a asesinos de Peñaflores
La juez de Control, Hilda María Márquez, vinculó a proceso penal a 3 personas por el asesinato del jefe policiaco de Cuauhtémoc, Efrén Peñaflores, y su escolta Leonardo López, ocurrido el 26 de febrero pasado. Dio un plazo de 4 meses para finalizar la investigación y turnó una queja a la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) por tortura denunciada por uno de los imputados.
Durante la audiencia de ayer se determinó que existen los elementos suficientes para tener ligados a ese crimen a Miguel Ángel R. V., alias “La Parka”, Manuel R. V., y Jesús Hernán R. L., alias “El Turco”, integrantes del grupo criminal “Los Iraquíes”, detenidos un días después del homicidio, registrado en la ciudad de Chihuahua.
Al momento del ataque, los hoy fallecidos y sus escoltas no portaban armas de fuego debido a un problema que habían tenido con el permiso de portación ante la Fiscalía, lo que llevó a la juzgadora a establecer alevosía y ventaja por parte de los posibles responsables.
Otro de los elementos para vincularlos a proceso penal fue el intercambio de mensajes vía Whatsapp, plataforma en la que se dieron indicaciones con fotografía del objetivo y se informó de haber finalizado el trabajo.
La representación de la Fiscalía precisó que mediante whatsapp los hoy detenidos alardearon del crimen, compartieron fotografías de noticias y ahí se dieron cuenta a quién habían asesinado, pues todos ellos fueron enviados por una persona a la que llamaban “patrón”, sin identificar aún.
En este caso, la esposa de “El Turco” estaba detenida pero fue liberada recientemente al ser considerada como testigo en este caso.
Ellos dos quedaron a disposición del MP tras el crimen luego de ser interceptados por elementos policiacos al supuestamente huir de una persecución.
Éste tomó ayer la palabra en la audiencia y acusó a Fiscalía de haberlo trasladado a una casa de seguridad, torturarlo y exigirle asumir la culpabilidad, además de amenazarlo con matar a su familia. Ante ello la juez turnó la queja ante la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) para investigarlo.
Mientras que a los hermanos Miguel Ángel y Manuel, originarios de Durango, se les detuvo en un cateo en una vivienda de Campobello, donde estaban hospedados. También está detenido otro de sus hermanos, menor de edad.
Aparte de esa acusación como coautores del crimen, se les tiene vinculados a proceso penal por posesión de armas de fuego exclusivas del Ejército y narcomenudeo.
Juez turna a CEDH queja de uno de los detenidos por tortura