Hartos policías de “Pinocho” Aparicio
Inconformes amagan con nuevos paros”
• Una panista, blanco de crítica panista
•Hay libro obligado de Lucha en escuelas
•Cada vez más religioso el Estado laico
MOLESTOS, así con mayúsculas, permanecen los policías estatales y elementos de la Fiscalía, por lo que consideran es una burla de parte de sus mandos superiores, y de manera muy particular del Comisionado Estatal de Seguridad, Óscar Aparicio Avendaño.
Tuvo el jefe policiaco la desfachatez de declarar que Chihuahua casi casi es el paraíso de los policías y que en estas tierras todos los bonos de riesgo y retroactivos que deben recibir los elementos, ya se encuentran cubiertos.
Las reacciones no se hicieron esperar. La “tropa” asegura que se trata de una vil mentira, y que el pago de los bonos continúa siendo uno de los muchos pendientes y adeudos que sostiene para con ellos la corporación.
Ahora de “Pinocho” no lo bajan. Afirman que el comisionado miente al decir que el saldo está cubierto, al igual que lo hace cuando habla de que Chihuahua se combate la inseguridad o que se hará justicia a los elementos que han muerto en cumplimiento del deber, luchando contra el narcotráfico.
Lo que además les colmó el vaso, es que en lugar de pagar sus pendientes, la Comisión adquirió una camioneta blindada que no dudan se sumará a muchas otras que permanecen estacionadas y sin usar en las instalaciones del C4.
Así que los inconformes amagan con nuevos paros, entre ellos impedir el acceso este fin de semana a las visitas familiares y conyugales en el Cereso de San Guillermo. Dicen que Aparicio tiene dinero de sobra y hasta costosos regalos para su jefe el Fiscal, César Peniche, pero los pendientes con la infantería los cumple nomás en discurso.
Contrario a otros, los custodios sí son de armas tomar. La policía penitenciaria ésta dispuesta a entrarle, a hacerse escuchar, a pesar de que en pasadas manifestaciones hasta boletas de arresto, amagos de despidos y otras sanciones recibieron.
Este día las agrupaciones que integran los colectivos LGBT realizarán la
“marcha del orgullo” por las calles del centro hasta culminar en la Plaza de Armas, y como cada año las voces en pro y en contra se dejan escuchar.
Pero esta vez los cañones de los grupos que defienden la vida y a la familia tradicional no se enfocan en la manifestación, sino en personaje de la política chihuahuense: la diputada panista Blanca Gámez.
Gámez Gutiérrez ha despertado la ira conservadora y del grueso de los panistas al impulsar desde la tribuna del Congreso una iniciativa de reforma a la Constitución Política del Estado para armonizarla con la Constitución federal, en materia de derechos humanos.
El decreto aborda aspectos en materia de trabajo, alimentación, salud, vivienda y por supuesto toca puntos que exhiben su contradicción tremenda sobre el partido al que pertenece.
Establece, por ejemplo, la igualdad de derechos del hombre y la mujer ante la Ley y los Derechos Humanos; prohíbe la discriminación por preferencias sexuales; valida el ejercicio de la sexualidad en forma libre y faculta la autodeterminación y el libre desarrollo de la personalidad, lo que para los detractores es una puerta abierta al aborto, la eutanasia, drogas y hasta la pedofilia.
Así que la panista es blanco de señalamientos. Se le acusa de obedecer consignas y dictados de ideologías radicales del gobierno estatal que operan a través de grupos feministas que buscan imponer la ideología de género y otros pecados.
Lo peor en esta batalla es que el ayuntamiento de Chihuahua ya aprobó el decreto, pero aun está pendiente de hacerlo Juárez, Cuauhtémoc, Parral, Ojinaga, Delicias, y otros municipios con peso electoral.
Si los 20 ayuntamientos que representan el 50 por ciento del padrón electoral, aprueban el decreto, la iniciativa de Blanquita se hará una realidad, y ello convertirá a Chihuahua –desde el punto de vista de los grupos como Cruzada por la Familia – en Sodoma y Gomorra.
Dicen que “cada maestrito, tiene su librito” y para el gobierno del nuevo amanecer el inspirado en la vida de la consejera jurídica, Luz Estela Castro, se ha convertido en la biblia de los derechos humanos que - moviendo la estructura educativa – se busca meter en la cabeza del estudiantado chihuahuense.
Aquel añejo entusiasmo de promover la lectura de “El Quijote” ha aminorado y ahora desde la Secretaría de Educación y Deporte y de los Servicios Educativos del Estado, le están poniendo todos los kilos a la difusión del texto que narra la vida quijostesca de la actual consejera de la Judicatura y mandona del gobierno.
Se trata de la obra “La Lucha: La historia de Lucha Castro y los Derechos Humanos en México”, que Corral dispuso promover en escuelas como herramienta formativa. Con ese texto sobre la banca los estudiantes realizan discusiones y hasta la presentación del monólogo “Yo soy Lucha”.
El programa piloto ya operó en la secundaria 8 y ahora otras instituciones han sido colocadas en la lista para ponerlo en marcha en el ciclo escolar en puerta.
Una de las instituciones que ya lo aplicó es la Normal Rural de Saucillo por lo que nada extraño sería que en futuras protestas contra el gobierno las aguerridas normalistas no sólo bloqueen las calles del primer cuadro de la ciudad, sino que radicalicen más sus acciones tomando como referencia las vivencias y experiencias de la abogada barzonista.
Por lo pronto, el Estado ya ha hecho acopio de un buen número de ejemplares, y el libro se vuelve pan caliente.
Hablando de libros está semana la Casa Chihuahua reunió al selecto círculo de la izquierda corralista durante la presentación de la obra del presbítero y derechohumanista Camilo Daniel, y en donde Manuel Arias Delgado, director de los Servicios Educativos se llevó las palmas al aventarse un “palomazo” en saxofón. La imagen en nuestra edición digital.
Arias, a quien grupos del magisterio traen entre ojos por considerar que se ha convertido en el verdugo de los maestros que no comulgan con Javier Corral, interpretó “la sombra del amor” despertando suspiros entre los asistentes, entre ellos su amiga y correligionaria Luz Estela Castro, que fungió como presentadora del libro.
Al evento asistieron el sacerdote Javier “El Pato Ávila”, el secretario de Desarrollo Social, Víctor Quintana; la Comisionada de los Pueblos Indígenas, Teresa “Peti” Guerrero, la Secretaria Técnica de los Servicios Educativos, Alma Gómez Caballero, y otros más que tanto molestan a la vieja guardia panista, por considerarlos avenidos al poder.
Por supuesto también acudió el gobernador con su esposa Cinthia Chavira, y la diputada panista Blanca Gámez.
La presentación del libro, una obra netamente religiosa, dejo un buen sabor de boca tanto que ya se prepara un acto similar en Parral, con el apoyo de gente muy cercana a la consejera de la judicatura.
El estado laico metido hasta el tuétano en asuntos del César... del nuevo César Duarte en el régimen estatal.