Dobles de riesgo
Cuando se ve una película, resaltan las acrobacias que realizan los diferentes actores y actrices. Desde saltos inimaginables, peleas, balazos y muchas más que te dejan boquiabierto. Las hacen tan rápido y con el apoyo de expertos en disimular sus apariencias que terminamos creyendo que son espectaculares.
Pero no siempre ocurre así. Los “dobles” o personas que se emplean para hacer las escenas más peligrosas y no poner en riesgo la vida de los protagonistas originales también forman parte de la industria cinematográfica. Los hay aquellos que son tan diferentes, pero también los muy parecidos a los actores y actrices principales.
En la industria cinematográfica no es oro y glamour todo lo que reluce y es que, aunque a simple vista no lo parezca, meterse en la piel de un personaje puede conllevar una serie de riesgos. Consciente de ello, los cineastas contratan a menudo a dobles de acción para interpretar aquellas secuencias más peligrosas.