“Roberta” la hizo vivir un duro momento
Dulce María segura que lloró cuando finalizó el proyecto que la llevó por todo el mundo
Ciudad de México-- La telenovela Rebelde y el éxito que consiguieron con el grupo RBD marcaron la vida de sus protagonistas, pero la separación traería un duro golpe para algunos de ellos.
Así lo reveló Dulce María, quien con mucha sinceridad habló de los difíciles momentos que pasó ante el final del proyecto que llevó su carrera alrededor del mundo.
En retrospectiva, la cantante y actriz ha entendido que no vivió el momento de duelo que necesitaba, lo que la llevó a enfrentarse de forma más complicada al fin de aquella etapa.
“Para mí fue algo como muy fuerte porque es terminar un ciclo, de estar viajando, de estar con esta euforia de conciertos, de gente, de estar con lo que se convierte en tu familia… Llegaba a llorar a mi casa”, narra Dulce sobre el momento en el que supo que el proyecto estaba por llegar a su fin. “Tuvimos el último concierto en Madrid y me regresé directo a grabar (la novela Verano de Amor)”, comenzó a relatar la también autora en entrevista con el Burro Van Rankin para Hoy, “Fue muy fuerte porque para mí como que no hubo ese duelo que yo necesitaba. Son tantas cosas que se mueven, que cambian en tu vida, que ya terminando la novela me entró una crisis... Llegaba a llorar a mi casa. Y de empezar a hacer mi disco de solista y me entró una onda de no querer hacer nada”.
No sólo el fin del proyecto fue difícil, lidiar con el éxito que alcanzaron tampoco fue algo sencillo. “Fue algo muy fuerte, porque más allá de creerme como mucho o algo así, me pasó que estaba en un momento, en un boom en mi carrera profesional, en un momento en el que tenía 18-19 años, que te gritaba muchísima gente, te conocía todo mundo. Profesionalmente me estaba yendo muy bien, pero por otro lado emocionalmente era mucha soledad”, confesó la actriz al hablar sobre aquellos momentos en los que no podía estar en su casa o con su familia porque viajaban de país en país.
Al ser cuestionada sobre si alguna vez sintió que durante el proyecto sufrió una depresión, aceptó que aunque no se sentía del todo bien emocionalmente, la complicada agenda los llevaba constantemente de viaje o a los foros de grabación para continuar con la novela.
“No había forma, tenías que ser fuerte o ser fuerte”, pero precisamente en ese momento encontró uno de sus mejores desahogos, el escribir.