Continuá la Fiscalía sin ADN de Alondra y Salma
De las dos osamentas que podrían estar ligadas a los casos de la niña Alondra Nolasco Corpus y de la joven Salma Montes Soto, aún no se ha logrado obtener el ADN (ácido desoxirribonucleico), por lo cual siguen sin ser identificadas.
Alondra de 9 años desapareció en septiembre del 2017. Quien presuntamente se la llevó fue su abuelastro Ramiro Córdova Cárdenas, en cuyo domicilio ubicado en la colonia Diego Lucero, localizaron restos óseos en las coladeras, al parecer habían sido quemados.
La joven de 22 años Salma, quien llevá desaparecida poco más de dos meses y de quien se presume estuvo por última vez con su expareja, es relacionada con los restos óseos encontrados el pasado 7 de junio en un arroyo ubicado en la carretera Delicias-rosales, justo donde se encuentra el rastro municipal de Delicias. La joven fue vista por última vez en el centro de la localidad antes mencionada. El ADN de estos restos tampoco se ha podido obtener.
En este sentido el presidente de la Asociación de Investigación y Capacitación Forense, José Corral Lozano, comentó que de cualquier parte del cuerpo humano se puede obtener el ADN, siendo los huesos y los dientes con los que más tarda el proceso en obtenerlo, pero son las partes que más duran.
Asimismo, dijo que el proceso para obtener el ADN tiene que hacerlo un especialista, además debe de contar con el equipo necesario para realizar dicho procedimiento, argumentando que es costoso el proceso por el material a usar.
Corral Lozano señaló que en el caso de los cuerpos y osamentas que se encuentran en el Servicio Médico Forense del Estado, muchos no se han obtenido el ADN ya sea por la falta de presupuesto y por la carga de trabajo del poco personal especializado.
Además dijo que otra acción necesaria para identificar a los cadáveres es crear una base de datos con las huellas dactilares y perfil genético de los chihuahuanses, ya que sólo cuentan con la información del personal de las corporaciones policíacas y de las personas que han sido detenidas en algún momento.
Recalcó que las pruebas genéticas cuestan dinero aunque se pueden obtener de saliva, cabello, sangre, tejido, huesos, dientes, fluido corporal, pero lo más sencillo para identificar un cuerpo es buscar si fisicamente tiene tatuajes o alguna característica especial, incluso la huella dactilar que puede obtenerse al hidratar dicha parte del cadáver.
Agregó que las condiciones climáticas y la zona donde fue expuesto el cuerpo de la persona muerta, además del grado de descomposición, hace más difícil o no lograr obtener el ADN lo más rápido posible.
Exigen ciudadanos no olvidar a desaparecidos
Ciudadanos chihuahuenses han tomado la iniciativa y exigen a la autoridad no olvidar a los desaparecidos, y se han unido en redes sociales, retomando casos de niñas y jóvenes que aún no han sido localizadas.
Uno de los casos emblemáticos de la ciudad es el de la niña Alondra María Nolasco, quien desapareció el 18 de septiembre de 2017 en la colonia Vistas del Norte, y piden no olvidarse de ella, además de encontrar al principal sospechoso, Ramiro Córdova Cárdenas.
“Cómo es posible que se desaparecieron de la faz de la tierra, tanto tiempo buscando y no hay respuesta alguna “, es uno de los comentarios de los usuarios de las redes sociales.
Asimismo, se compartió la pesquisa de Sigrid Kassandra Diaz Huerta, quien desapareció el 29 de Mayo de 2018 en Parral, señalando que ya son pocas las personas que ayudan a compartir su foto, pero agradeciendo a quien sí lo hace.
Los más recientes son el de Rubí, de 12 años de edad, quien duró 26 días ausente, ella fue sustraía por un hombre de 29 años de edad y de origen hondureño, pero fueron localizados y la menor asegurada en la frontera de México con Guatemala; sin embargo, el presunto raptor logró escapar.
El más reciente es de la niña Dulce de 11 años, a quien presuntamente se la llevó José María Nuñez Portillo de 30 años de edad y quien hasta la fecha no ha sido localizada. Ella fue vista por última vez el pasado jueves 1 de agosto de 2019.
Ahora los chihuahuenses han creado diferentes páginas en redes sociales para publicar y exigir a la autoridad que no dejen de buscar a las personas desaparecidas, sean niños, niñas, adolescentes, mujeres u hombres.
Crean páginas en redes sociales para difundir las pesquisas