Más de 220 acusan a iglesia de abuso sexual
Agat, Guam— Mientras que en el resto del mundo estallaban escándalos en torno a abusos sexuales de curas, el tema se mantuvo en secreto en Guam por generaciones e involucró al mismo jefe de la jerarquía católica.
Durante décadas religiosos que cometieron abusos controlaron el poder en una cultura de impunidad encabezada por un arzobispo que figura ahora entre los acusados. Anthony Sablan Apuron fue condenado en un juicio secreto en el Vaticano y suspendido en el 2016, tras lo cual se eliminaron muchas de las restricciones que había a la denuncia de abusos.
Más de 200 exmonaguillos, estudiantes y boy scouts están demandando a la arquidiócesis de Guam por los abusos sexuales de 35 clérigos, maestros y jefes de boy scouts en la esperanza de que se haga justicia. La arquidiócesis se acogió a una protección de acreedores este año ya que calcula que puede ser obligada a pagar al menos 45 millones de dólares y los sobrevivientes tienen hasta el 15 de agosto para solicitar un acuerdo económico.
Miles de páginas de documentos analizadas por la Associated Press y numerosas entrevistas revelan una historia de abusos sistemáticos que datan de la década de 1950 y una reiterada colusión de curas depredadores. Siete hombres acusaron públicamente a Apuron de abusos sufridos de niños, incluido su propio sobrino.
El arzobispo, que tiene hoy 73 años, niega las acusaciones, pero en abril el Vaticano reveló que el papa Francisco había aceptado las conclusiones de un juicio secreto de la iglesia en el que fue hallado culpable de delitos sexuales contra menores.