"Estamos en shock"
Ciudad Juárez-- En la fachada principal del edificio D del Instituto de Ingeniería y Tecnología (IIT) de la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez (UACJ) fue colocado, desde el pasado martes, un moño negro por parte del personal docente y administrativo como símbolo del luto por el asesinato del catedrático Alejandro Alvarado Iniesta, de 34 años, esposo, y padre de dos niños.
A una semana del hecho violento, la comunidad universitaria apenas asimila el crimen del destacado investigador. El rector Juan Ignacio Camargo Nassar, lamentó los hechos y demandó a la autoridad estatal una investigación exhaustiva.
“Nos causa un impacto gigantesco. Estamos en shock, sigo y seguimos muy desconcertados, estamos tristes, alertas nerviosos, consternados, no es fácil asimilarlo. Existe una situación que nos tiene en desbalance”, expresó Juan Francisco Hernández, director de IIT.
Al recordar cómo se vivió el día que el docente fue privado de su libertad a unos metros de dos casetas de vigilancia de la UACJ, dijo que fueron varios los testigos que, sin saber que la víctima era docente universitario, observaron la camioneta abandonada y el cerco policiaco que se hizo sobre la avenida Del Charro y calle Manila.
“Vivimos el hecho de una manera dramática. Yo no vi el ejercicio de violencia, me tocó ser testigo cuando ya estaba la Fiscalía General del Estado (FGE) asegurando el auto, no sabíamos que era de un profesor”, narró.
Luego del impacto inicial por ese suceso y tras cerciorarse que los estudiantes estaban seguros en el interior del campus, las clases continuaron normalmente, ya que ignoraban que un maestro estaba en peligro de muerte; lamentó que la violencia generalizada en la ciudad sea algo normalizado.
El docente dijo que se enteró de la muerte violenta de su colega el sábado por la noche, cuando fue notificado del servicio funerario por otros docentes y sin saber que su amigo era el conductor del vehículo blanco que observó abandonado en contra esquina del instituto.
“Hasta el miércoles nos enteramos cómo fueron los hechos”, dijo el catedrático que destacó los logros académicos del profesor que impartió una clase el pasado jueves.
La mañana del jueves el rector Juan Ignacio Camargo Nassar, lamentó los hechos y demandaron a la autoridad estatal el esclarecimiento de los hechos y la demanda que mantenemos de vigilancia en los exteriores de los institutos.
“Lamentamos mucho los hechos violentos que ocurren en la ciudad y más cuando impactan a un miembro de la comunidad universitaria. La exigencia es la investigación de los hechos y que se dé con los responsables”, expresó.
“Me siento triste, es algo que no puede estar pasando”, expuso una alumna de IIT y aunque no fue alumna de Alvarado Iniesta, repudió su crimen.
Otra estudiante dijo que su padre fue docente universitario y se mostró muy impactado por la agresión contra un integrante de la comunidad universitaria.
“Mi papá me llamó para preguntarme si estaba bien”, dijo la estudiante.
“Como alumnos, como maestros debemos hacer algo para protestar y exigir que no sigan ocurriendo estos hechos en la universidad”, intervino su compañera.
Ayer por la tarde integrantes del Colectivo Uni Unida reprobaron los hechos violentos en un pronunciamiento que hicieron público a través de las redes sociales.
Pérdida irreparable
Un docente comprometido con la enseñanza, la institución, pero particularmente con sus estudiantes de licenciatura, maestría y doctorado, así es recordado Alejandro Alvarado Iniesta en el campus que desde el 2011 se convirtió en su segundo hogar.
“Era un gran profesor, un gran ejemplo para muchos muchachos, él era muy joven, se graduó del doctorado en la Universidad Estatal de Arizona en el 2011 y ese mismo año cuando entra al Instituto. Era experto en optimización e investigación de operaciones que impartía en la Ingeniería Industrial y era muy competente”, recordó Juan Francisco Hernández, director de IIT.
“Alejandro era investigador nacional nivel 1 y prácticamente tenía sus artículos y publicaciones científicas y conocimiento de innovación suficientes para solicitar el nivel 2 del Conacyt, esa era su siguiente meta”, agregó.
El investigador se incorporó este año a clases a la UACJ, ya que solicitó su año sabático para trabajar en modelos de optimización y produjo cuatro artículos científicos que tenían entre 99 y 100 citas por artículo
“Era comprometido con los estudiantes y comprometido con la institución. Su partida afecta mucho a su familia y a sus niños pequeños. Lo recordamos como el gran profesor, tutor y ejemplo de excelente investigador”, puntualizó Hernández.
En los próximos días la UACJ dará a conocer la fecha del homenaje póstumo que rendirán al docente victimado.
Comunidad universitaria lamenta el hecho y rector exige investigación exhaustiva