¿Cuál AMLO viene?
Ciudad Juárez.- Esperemos que la visita del presidente no sea “turismo político”, porque sin duda le espera una larga lista de promesas no cumplidas, inconclusas, más lo que quiera prometer en tierras juarenses.
De entrada, en la Guarnición de la Plaza se sostendrá “la mañaneta”, “la marañera”. “la marioneta”, “la maromera”, “la mañanera”; todo depende de qué punto de vista se quiera adoptar, las noticias que se quieran saber o las ocurrencias que se quieran preguntar, algo “exótico” para el ejercicio de la prensa y la divulgación de la información; su popularidad según las encuestas, no ha tenido una merma considerable, aunque bien pudiéramos usar esa frase de escapismo de la realidad, “tenemos otros datos”.
El hoy presenta virtudes, cuestionamientos, desencantos y fanatismos; los preceptos básicos de su propuesta de gobierno como el combate a la corrupción y el humanismo no han alcanzado para sostener el desarrollo económico, social y político de un país que arde en incertidumbre y al que se le esta tratando de mitigar rociándole gasolina de políticas públicas impopulares.
No ha sido un gobierno tan cercano a la gente, el que viaje en aerolíneas comerciales, que camine junto a la gente, se vea todos los días en la madrugada con su gabinete de seguridad, que aproveche sus viajes para comer en los pueblos; nada garantiza que los ciudadanos tengamos un aprecio y valoremos su “cercanía”; las lecciones no se ven reflejadas en su etapa como presidente.
Juárez, no ha podido crecer de la forma que merece, su fortaleza económica, su proyección social y política han estado maniatadas en especial desde 2008.
Como ciudadanos esperamos respuestas puntuales ante la situación de extrema violencia, en ocasiones reducida gracias al impulso de programas sociales, a la coordinación efectiva de las instancias de gobierno, el incansable trabajo de responsabilidad social de los empresarios y el fuelle que tiene el factor educación en nuestra frontera.
¡Queremos y exigimos planteamientos estratégicos a las necesidades de seguridad de los juarenses! La frase de “abrazos y no balazos” es tan insensible y a la vez tan hueca cuando de alguna otra forma se ha trastocado la tranquilidad de la persona en su patrimonio o en su círculo cercano.
La violencia es la primera causa de insatisfacción del ciudadano; no hay forma de ignorar este problema estratégico, es indispensable que toque ese tema acompañado de una estrategia -sustentable y realista- para atacar este problema. Este punto debe incluir los delitos como los secuestros, extorsiones, feminicidios; una asignatura pendiente que bien pudiera ser tema de una reunión privada con los grupos que trabajan en torno a esta dolorosa realidad de nuestra sociedad. Si quiere cercanía a lo que más le duele a la gente, tenga una reunión con quienes han perdido a un ser querido de forma violenta y con las mujeres que están expuestas a un evento violento, a aquellas que las circunstancias las obligan a trabajar y ser sustento de una familia, las que tienen que dejar a sus hijos solos y las que han sido violentadas física o verbalmente; que no encuentran la forma de paliar sus momentos de angustia; el tejido social está en la frontera de la necrosis social y los apoyos para estas situaciones son cada vez más restringidos.
Lo recibimos con el respeto que merece, pero igual esperamos que venga a ofrecer soluciones y no repartición de culpas o revanchismos, comunes en sus discursos populistas; hay otras asignaturas.
Señor presidente, por favor no plantee argumentos sin contundencia, no divague, ni busque salidas fáciles a las preguntas; traiga consigo una apertura para oír lo que nos aqueja, una actitud de servicio para atender y sobre todo; un equipo que sea lo más capaz para llevarse una realidad y que plasmen en acciones lo que requiere la frontera.
La diferencia entre hacer de esta visita un encuentro con la máxima autoridad del país y buscar soluciones a la problemática o solamente tener una visita de turismo y folclor político es la intencionalidad con la que usted y su equipo atiendan los planteamientos; una acción critica para la credibilidad de su filosofía de gobierno.
No se trata de colores de partidos, de culpas, de ira, de divisionismos; se trata de entender los retos de nuestra ciudad; de hacer alianzas para que entre todos podamos construir la calidad de vida que nos merecemos. La viabilidad de su proyecto de nación es totalmente proporcional a la calidad de sus acciones para gestar los resultados que se necesitan.
La percepción del AMLO que estará en la frontera depende de usted, la palestra, la batuta y la atención son suyas; los cuestionamientos van por nuestra cuenta.