CÓMO FUNCIONA?
Tan innovadora y compleja como puede imaginarse, realizar esta “holotransportación” requiere un kit que en realidad cabe en una mochila. Y es que para un ejercicio como el de llevar a Schimd a la EEI bastó con el dispositivo holográfico Hololens de Microsoft y una computadora con software desarrollado por AEXA Aerospace. “El software es 100 por ciento de nosotros, se llama Holowizard, es 100 por ciento de AEXA”, remarca el CEO de esta empresa, contratista de la NASA y de la Defensa de EU. “Nosotros hemos estado desarrollando software por medio de hologramas para entrenar astronautas, en 2016 empezamos con esta tecnología para que pudieran entrenar todos juntos”. El buen funcionamiento de sus primeros trabajos fue tal, que llegaron a hacer una simulación médica en la base submarina Aquarius de la NASA, en Florida, en la que por medio de hologramas, un cirujano desde Houston diagnosticaba y daba instrucciones para atender el pulmón colapsado de un astronauta. Sólo que en ese momento las imágenes proyectadas en realidad eran avatares, lo cual no parecía terminar de gustar a todos. A lo que De la Peña Llaca respondió que podían hacer la teletransportación holográfica, de forma parecida a como Microsoft la había empezado a desarrollar. “Ellos usan 105 cámaras, lo graban y lo proyectan, pero no es en tiempo real. Usan un ancho de banda que utiliza entre 665 Megabits por segundo (Mbps); no es posible transmitirlo al espacio. Se trata, pues, de un tipo de tecnología de captura que permite que modelos 3D en alta calidad puedan ser reconstruidos, comprimidos y transmitidos en vivo a cualquier parte.