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Cleveland— Jadeveon Clowney tenía numerosas razones para regresar y jugar una segunda temporada con los Cafés. Conocía el entorno, ganaría dinero y vería acción otra vez al lado de Myles Garrett.
Sin embargo, una fue la de mayor peso.
“Mi muchacho ha venido aquí”, declaró el defensive end. “Deshaun”.
Clowney dijo el jueves que la sorprendente adquisición por parte de Cleveland del controvertido mariscal Deshaun Watson, su excompañero de equipo en Houston, fue la principal razón para que decidiera regresar con los Cafés.
Watson, cuyo futuro sigue siendo turbio ante las acusaciones de acoso y abusos sexuales que han manifestado varias mujeres en su contra cuando estaba con los Texanos, renunció en marzo a la cláusula que impedía su canje a otro equipo y firmó un contrato de cinco temporadas por 230 millones de dólares con los Cafés, que quizá pongan fin a su larga búsqueda de un mariscal permanente.
Una vez que se dio esa situación, Clowney supo que se quedaría en Cleveland.
“Se trataba de a dónde iría mi muchacho Deshaun”, dijo el jugador tres veces elegido al Pro Bowl cuando los Cafés concluían su minientrenamiento obligatorio con una práctica dentro del estadio Firstenergy.
“Cuando conversé con ellos (los Cafés), dije: ‘Yo jugué con él, nos aportaba bastante ventaja, al lograr que la defensiva descansara mucho tiempo fuera del campo’. Dije: ‘sé que nos dará bastante ventaja defensiva, hace muchos puntos, crea situaciones en que avanza con acarreos en lugar de tener que parar a la ofensiva rival todo el tiempo’.
“Yo únicamente quería jugar con él y ver qué puedo hacer nuevamente con él”.
Los Cafés, Halcones, Panteras y Santos fueron los últimos equipos que hicieron ofrecimientos por Watson, que enfrenta 24 demandas civiles de masajistas que lo acusan de conducta sexual indebida.
Además es posible que la NFL lo suspenda.
A la pregunta de que habría pasado si Watson hubiera escogido Atlanta, Clowney dijo que “posiblemente lo habría seguido allá”.
Clowney firmó en mayo un acuerdo con los Cafés de una temporada por 10 millones de dólares.
“¿Pero quién sabe? Él terminó aquí. Estamos aquí ahora. Así es. Vamos. A perseguir lo que haya que perseguir”.
Pero perseguir mariscales es lo que Clowney sabe hacer mejor y desea tener una campaña destacada, logrando más que en 2022 en una especie de resurgimiento personal.