Riesgos de utilizar lentes de contacto sin prescripción
Aun cuando pueden parecer divertidos para disfrazarnos o para llamar la atención con un cambio de look, lo cierto es corremos algunos riesgos al utilizar lentes de contacto sin prescripción.
Su uso inapropiado puede acarrear diversos problemas, que abarcan desde posibles lesiones, hasta úlceras e infecciones. De hecho, a veces llegan a comprometer la visión de la persona.
Por eso, solo deben utilizarse bajo la supervisión de un oftalmólogo, quien hará con antelación los exámenes correspondientes para determinar su uso seguro.
BLANDOS O RÍGIDOS
Los primeros están hechos de un material que permite el paso del oxígeno. De este modo, el usuario puede mantenerlos por varios días sin molestias. Por su parte, los rígidos (también llamados RPG), son más resistentes y, por ende, duran un poco más.
Dado que entran en contacto con la superficie del ojo, los lentes de contacto deben manipularse con mucha precaución.
Desechables o de uso prolongado Como su nombre lo da a entender, los desechables se usan y se reemplazan. Aunque hay algunos que pueden colocarse por varios días seguidos. Los de uso prolongado tienen una vida útil más larga. Hay quienes los mantienen por semanas, aunque es conveniente dejar descansar los ojos algunas noches.
CORRECTIVOS O COSMÉTICOS
Los primeros se usan para corregir algún problema de la vista, como miopía, hipermetropía o astigmatismo. Por supuesto, estos deben ser formulados de acuerdo con la necesidad particular de la persona.
Los cosméticos, también llamado “decorativos”, “sin aumento”, “de disfraces” o “de colores”, se usan para distintos fines u ocasiones, como una fiesta, un evento especial o simplemente porque la persona desea dar un cambio a su apariencia. Sin embargo, su uso conlleva a ciertos riesgos.
¿POR QUÉ SE REQUIERE PRESCRIPCIÓN?
Como se mencionó, los lentes de contacto correctivos se tienen que adaptar a la necesidad particular de cada persona. Y aunque dos pacientes tengan el mismo problema, por ejemplo miopía, esta no necesariamente es igual en cada uno. Las dioptrías varían entre un caso y otro.
También es frecuente que una persona tenga en un ojo un grado de desviación distinto con respecto al otro. Incluso, no es extraño que se presenten dos o más problemas, como hipermetropía y astigmatismo a la vez.
Esto nos da a entender que el panorama puede ser algo complejo. Aunque no es imposible, es poco probable que a dos personas les sirvan los mismos lentes correctivos.
Así pues, acudir al oftalmólogo es una necesidad. A través de un examen ocular, el profesional puede obtener la fórmula adecuada para elaborar las lentillas a la medida.